La cifra se eleva a 22 mil en todo el Departamento. En el 2010 ingresaron 24 millones de pesos a la ciudad. La asignación parece haber enfrentado tres falencias clave de la marginalidad social: la falta de ingresos estables en familias desocupadas ó con magros salarios, el abandono de la educación formal y hasta la ausencia de documentación.
La Asignación Universal por Hijo llega a 17 mil chicos riocuartenses y 550 mujeres embarazadas. La cifra se eleva a 22 mil beneficiarios si se contempla todo el Departamento. Solo en el 2010 ingresaron 24 millones de pesos a Río Cuarto por el aporte estatal.
La asignación parece haber enfrentado tres falencias clave de la marginalidad social: la falta de ingresos estables en familias desocupadas ó con magros salarios, el abandono de la educación formal y hasta la ausencia de documentación.
Marisa tiene dos hijos y vive junto a su padre en el barrio Cola de Pato. Su pareja la abandonó hace dos años y debían sustituir con una jubilación mínima. Hizo el trámite para que su hijo mayor recibiera la prestación y ahora busca que el menor de 3 años obtenga un DNI para sumarse al plan.
«Quiero que tenga el documento para que nos den la asignación. Son muchos trámites y hay que ir varias veces», admitió la mujer en diálogo con Telediario.
Sostuvo que para mantener el aporte de su hijo escolarizado debe presentar la cartilla de vacunación y la libreta del establecimiento educativo.
Con seis hijos, Marta es un ejemplo del impacto de la asignación. Su esposo es vendedor ambulante y el ingreso en la familia apenas alcanza para subsistir.
«En mi casa y en el barrio influye mucho. Acá los chicos dejaron de estar en las calles para cobrar la asignación. Ahora van todos a la escuela», reconoció.
«Autocontrol»
El titular del ANSES, Sergio Rivarola, sostuvo que «el beneficiario sabe que para tener un derecho efectivo debe existir el autocontrol»
«Para la liquidación del monto que ahora pasa al 270 deben cumplir con el ciclo de vacunación y con la certificación escolar, año tras año. De lo contrario el beneficio queda suspendido», advirtió.
En el caso de las embarazadas, Rivarola dijo que pueden cobrar el aporte y a través «de un trámite sencillo» lograr la continuidad tras el nacimiento.
Admitió que las principales dificultades se presentan en los casos de padres separados donde no queda claro judicialmente la tenencia.
«Anses no puede tomar partido en una diferencia de parejas. Para eso actúa la Justicia. Son muchos los casos que debemos enfrentar: entre 5 ó 6 por semana», señaló.
Finalmente, el funcionario valoró que «los trámites se efectúan en forma personal y se termina cualquier posibilidad de clientelismo».