(EFE).- Medio centenar de fotografías inéditas del primer concierto que ofrecieron los Beatles en Estados Unidos en 1964 fueron vendidas hoy en Nueva York por 285.450 dólares, muy por encima de los 100.000 dólares en los que habían sido valoradas por la casa de subastas Christie’s.
Un día en que volvió a quedar patente que la «beatlemanía» sigue más presente que nunca, hubo que esperar hora y media hasta el final de la puja celebrada este miércoles en Christie’s para ver el lote estrella de la subasta, una impactante imagen en blanco y negro en la que aparecen de espaldas los cuatro componentes de la mítica banda británica vendida por 55.000 dólares a precio de martillo.
La fotografía, de 40,6 por 41,2 centímetros, es una de las 46 instantáneas tomadas en 1964 por un desconocido, Mike Mitchell, durante el primer concierto que ofrecieron los Fabulosos Cuatro a sus fans estadounidense, lote que tras sumar impuestos y comisiones de la casa de subastas alcanzó un precio total de 68.500 dólares adjudicado a un comprador anónimo.
Otra de las imágenes que más interés despertó fue un primer plano de John Lennon y Paul McCartney parapetados tras sus guitarras en mitad de la actuación, que llegó a venderse en 24.000 dólares a otro comprador anónimo que tuvo que desembolsar 30.000 dólares tras los impuestos y comisiones correspondientes.
Christie’s, que logró vender durante la noche las 46 imágenes, también adjudicó otros cuatro lotes por encima de los 10.000 dólares, tres fotografías por 13.000 dólares cada una a precio de martillo, una de ellas tomada en la conferencia de prensa que ofrecieron ese día antes del icónico concierto, y otras dos instantáneas a 11.000 dólares cada una.
Antes de ser vendidas al mejor postor, las 46 imágenes en blanco y negro, hasta ahora inéditas, en las que aparecen John Lennon, Paul McCartney, George Harrison y Ringo Starr, estuvieron expuestas al público en la sede de Christie’s en la Gran Manzana desde el pasado 11 de julio.
Mitchell tenía apenas 18 años cuando asistió al concierto de los Beatles en el Washington Coliseum de la capital estadounidense, el 11 de febrero de 1964, dos días después de que la banda de Liverpol debutara en el programa de televisión «The Ed Sullivan Show», seguido por más de 74 millones de telespectadores, todo un récord para la época.
«Me sentí realmente entusiasmado, el público gritaba constantemente durante todo el concierto, yo estaba con la prensa justo delante del escenario y recuerdo lo alta que estaba la música, cómo se me quedó grabada», afirmó Mitchell a Efe durante la inauguración de la exposición.
El fotógrafo recuerda perfectamente cómo sintió entonces que ese concierto era un «hito». «Era algo totalmente diferente a cualquier cosa que hubieras visto antes», detalló Mitchell, un seguidor de los Beatles que durante casi cincuenta años guardó estas instantáneas y que ahora decidió ponerlas en venta por motivos financieros.
Mitchell recuerda cómo la música de los Beatles ya sonaba en Estados Unidos y cómo sus canciones estaban entre las cinco más populares del país, por lo que afirma que no era de extrañar que su primer concierto ante el público estadounidense desencadenara una verdadera histeria entre los seguidores del grupo.
Esa emoción de los fans se puede ver en esta colección de fotografías, entre las que también hay imágenes de la llegada de los artistas a la estación de tren de Union Station, así como de la conferencia de prensa que precedió a ese histórico concierto en Washington.
En muchos de los lotes más aplaudidos hoy aparecía un joven Paul McCartney, quien más de cuatro décadas después de aquel concierto, llenó por primera vez la semana pasada el mítico estadio de los Yankees en el Bronx, otra prueba más de que los Beatles siguen despertando pasiones en la Gran Manzana.
Imagen cedida por Christie’s. Reproducción de una fotografía de la colección de medio centenar de imágenes tomadas por el fotógrafo Mike Mitchell, del primer concierto de los Beatles en Estados Unidos, que se expusieron este 11 de julio en la sede en Nueva York de la casa de subastas Christie’s. EFE/Archivo