Un grupo de vecinas de Barrio Alberdi asiste a un Taller de costura en donde confeccionan ropa para niños carenciados.El Taller «San José, Divina Providencia» es un hervidero todos los días. Allí un grupo de mujeres trabaja sin cesar en forma desinteresada para confeccionar ropa para niños carenciados que luego entregan en algunos casos a través de Caritas y en otros, los llevan ellos mismos casa por casa.
Mercedes Calderón, la encargada del taller, también es la dueña de casa. Allí es donde instaló las máquinas de coser y de tejer propias y prestadas para realizar la tarea solidaria.
«Siempre nos gustó (con mi hija) hacer un trabajo p’or amor a los demás, porque no tenemos que pensar solamente en nosotros, tenemos que pensar que si nosotros necesitamos algo hay alguien que lo necesita más”, reflexiona Mercedes.
A diario es acompañada en su tarea por otras vecinas del barrio y juntas se dedican a diseñar prendas, cortar telas, coser, planchar y luego distribuir lo fabricado.
Están perfectamente organizadas y cada una realiza una labor específica. Religiosas de la Escuela María Benita Arias les entregan telas para que ellas efectúen las confecciones.
Pero el taller necesita ayuda para continuar con su labor solidaria. Requieren ayuda económica para poder realizar la reparación de las máquinas que se rompen o en su defecto, el necesario mantenimiento. También solicitan lana porque «desde marzo queremos empezar a hacer pullóveres y por eso la necesitamos. Para el invierno, para los chicos porque pensamos que ellos son los que más lo padecen», cuentan algunas de las obreras.
Las obreras aceptan donaciones en el mismo taller, que está ubicado en Malabia 671 del Barrio Alberdi.