Activistas sirios denuncian que Hamza al Khatib, de tan sólo 13 años, fue torturado hasta la muerte por las fuerzas de seguridad del régimen.
El niño, aseguran, se convirtió en un fuerte símbolo de la protesta contra la dictadura de Bashar Al Assad, quien respondió con más represión.
El niño se encontraba en una manifestación el pasado 29 de abril cuando fue secuestrado y desapareció durante un mes. Luego, se devolvió el cuerpo a sus padres que, según afirman, tenía claros signos de tortura.
na indignación general se desató cuando un video de su cadáver ensangrentado apareció colgado en YouTube.
La secretaria de Estado de los Estados Undiso, Hillary Clinton. dijo que estaba «muy preocupada» por el caso de Khatib, y que ese hecho «simboliza el colapso total» del régimen sirio. «Sólo puedo esperar que su muerte no haya sido en vano», manifestó Clinton.
En tanto, las autoridades sirias han negado que el niño fuera torturado. Según ellos, el menor «murió en una manifestación en la que pandillas armadas dispararon a los guardias».
Según activistas y grupos de Derechos Humanos, ya son más de 1.000 los muertos por la represión gubernamental, y 10.000 los detenidos en las 10 semanas que dura la protesta.