“En el último viaje del tren los vagones iban vacíos y el pueblo perdió mil puestos de trabajo. Volver a verlo pasar es muy emocionante”, afirmó Ramón Guerrero, el último boletero de Justo Daract, la localidad puntana que hoy disfrutará del regreso del tren, después de tres décadas.
En diálogo con Telediario Primera Edición, Ramón recordó que “el 12 de marzo de 1993, el último viaje del tren fue muy triste, todas las unidades iban vacías”
“Yo era un joven con mucha esperanza, pero lo que venía serían días difíciles. Para esa época Justo Daract tenía mil empleados ferroviarios que se quedaron sin trabajo, fue muy doloroso”, admitió.
El ex ferroviario dijo que “se vive con mucha expectativa y nostalgia el regreso del tren, aunque ya no circulará del mismo modo debido al deterioro de las vías”
“En una ciudad como la mía, con 12 mil habitantes, la esperanza de un chico humilde era trabajar en el banco, el correo o el ferrocarril. Formé una familia y mi luna de miel fue en un tren de Justo Daract a Córdoba para pasar unos días en el predio de la Unión Ferroviaria en Alta Gracia”, manifestó.
Y añadió: “Hoy los trenes volvieron modernizados. Quiero realizar un viaje aunque sean muchas horas, volver a vivirlo. Quiero recordar la función social del tren, que tenía un rol fundamental para los trabajadores y universitarios. Ojalá se recuperen vías y pueda volver el servicio a más ciudades y pueblos”
“En los años 80 en Justo Daract se instalaron más de 60 industrias. El tren traía la materia prima muy temprano y esperamos que los gobiernos hagan las inversiones necesarios para que esto vuelva a ser lo que fue”, destacó.