Los jardines maternales sufren las consecuencias de la cuarentena y al no estar contemplados bajo ninguna medida de ayuda económica nacional, ni municipal, manifiestan que no podrán pagar los salarios de sus empleados, por lo que algunas entidades no tendrán más opción que cerrar sus puertas.
Hablamos con Mariana Paglialunga, directora de uno de los jardines maternales de la ciudad, que nos describe la compleja situación por la que se encuentran las instituciones que se dedican al cuidado de infantes que van desde los 45 días a los tres años.
