Los remedios subieron en 2018 un 66,5% en relación con 2017. Esto es un 20% por encima del índice de inflación general. Ante esta situación, desde el Colegio de Farmacéuticos de la Provincia de Córdoba sostienen que cada vez más personas interrumpen sus tratamientos porque no pueden costear los medicamentos prescriptos por el médico.
Desde la entidad, vienen advirtiendo desde hace tiempo que la crisis está impactando en la conducta de los pacientes en las farmacias. Si bien dos años atrás, se observaba que la gente consultaba precios y se llevaba lo más barato, hoy perciben que directamente están cortando los tratamientos.
Remedios para el colesterol, paliativos del dolor, suplementos vitamínicos, antiinflamatorios y productos para facilitar la circulación figuran en la lista de lo que más se corta. En cambio, medicamentos contra la hipertensión o diabetes no se discontinúan porque “son de vida o muerte”.
Ante esta situación, Mariano Rosas, presidente del Colegio de Farmacéuticos de Río Cuarto manifestó en diálogo con Así Son Las Cosas que «hay una ley de prescripción genérica» y afirmó: «La gente debe poder elegir acorde a su bolsillo». Por último, Rosas expresó que «los grandes laboratorios son los formadores de precios, y no las farmacias ni las droguerías».