La galería horizontal para rescatar a Julen, el niño de 2 años que cayó a un profundo y estrecho pozo en Totalán (Málaga) alcanzó el metro y medio de longitud de los 3,8 necesarios y obligó a ejecutar una tercera ‘microvoladura’ durante la madrugada por las complejas condiciones del terreno.
Los mineros empezaron a descender este jueves, bajando de 2 en 2 en la cápsula diseñada por el director técnico del Consorcio Provincial de Bomberos de Málaga, Julián Moreno, y fabricada por 2 herreros malagueños. Sostienen que es la montaña la que marca el ritmo de trabajo del operativo, dada su extrema dureza.
Por su parte, la Guardia Civil sigue investigando las circunstancias de cómo cayó Julen al pozo hace ya 12 días. No se mueven de la boca del pozo, allí recaban datos y analizan cada detalle del terreno. Los agentes del Seprona esperan que los mineros lleguen al pequeño para después tomar decisiones.
Mientras ya interrogaron 2 veces al propietario de la finca y otras 2 al pocero, que insiste a los investigadores en que él dejó el pozo bien tapado y remite a quiénes han quitado el material que allí había.