Este domingo 28 de octubre no será un día más en la historia política de Brasil ya que el país vecino afrontará mañana la segunda vuelta de las elecciones presidenciales y deberá definir entre dos candidatos totalmente antagónicos.
Según las últimas encuestas, Jair Bolsonaro, representante de la ultraderecha, no tendría un triunfo «arrasador» como se esperaba. En su entorno había una gran expectativa: que el presidenciable superara 60% de los votos en la segunda vuelta del domingo. Una victoria “contundente”, como sería el caso, lo colocaría en una posición poderosa para negociar tanto con las fuerzas políticas, propias y ajenas, como para el otro pilar de su gobierno, los militares.
Tal como lo reveló Datafolha, la distancia con el petista Fernando Haddad se acortó en las últimas horas. Sin embargo, todo parece indicar que quien sucedará a Michel Temer será Bolsonaro, un candidato conocido también como el «Donald Trump brasileño», controvertido por su agresivo discurso nacionalista y sus frecuentes insultos contra mujeres, negros y homosexuales.
Cabe recordar que en la primera vuelta, celebrada el pasado 7 de octubre, Bolsonaro se impuso con un 46 % de los votos, frente al 29 % que respaldó al candidato del Partido de los Trabajadores.