Esta semana, el fiscal de Huinca Renancó, Luis Saragusti, ampliará la imputación al comisario Hugo Guzzetta y la defensa contraataca con sospechas sobre los fondos de las comisarías en el departamento General Roca.
Guzzetta recuperó el viernes por la tarde la libertad, tras una resolución del juez de Cámara Pablo Bianchi, pero su situación procesal se agravará y volverá a ser indagado por nuevos hechos.
En diálogo con Póster Central, el doctor Luis Sánchez aseveró que «esta causa ha puesto en evidencia un tema central que es el manejo del dinero en las comisarías, donde había una desprolijidad total y falta de transparencia»
«En una comisaría, un subordinado llevaba los fondos en un cuaderno Rivadavia y tenía el dinero de la Comisaría en su propio domicilio. En dos allanamientos se determinó que policías de Villa Valeria y Sarmiento tenían esos fondos en su casa», aseveró.
Añadió que «hubo más de 20 declaraciones y creo que se deben investigar nuevos hechos que involucran a otras personas por el delito de malversación de fondos»
«Hubo una donación de un productor rural a un policía, no a la comisaría, sino al propio efectivo, en el vocabulario común esto se llama coima», resaltó.
Añadió que «también le cobraban al dueño de un boliche por más agentes de seguridad que los que correspondía».
Sánchez precisó que esta semana «se va a ampliar la imputación a mi defendido por nuevos hechos y será indagado nuevamente».
Por su parte, Guzzetta dijo que «el dinero de la comisaría nunca estuvo en mis manos». «El manejo lo hacía un sargento y si necesitaba para la Comisaría se lo pedía a él. En todas las comisarías el manejo es así. A estos comisarios (Giacusa y Safigueroa) les molestaba mi forma de trabajo y los cambios que apliqué se reflejaron en una caída del delito», aseveró.
El comisario añadió que los vecinos de Achiras, Villa Valeria y Adelia María «respaldaron el trabajo realizado»
Rompió el silencio
La resolución del juez de Control habìa sido una dura advertencia a su condición de detenido en la Unidad Penitenciaría Número 6. El magistrado validó el testimonio de una agente de la comisaría de Villa Valeria y las acusaciones de dos comisarios del Departamento General Roca que le apuntan como presunto responsable de graves delitos, algunos bajo estricto secreto de sumario. Cercado por una trama policial que lo dejó aislado, Hugo Guzzetta decidió romper el silencio desde el pabellón carcelario.
En diálogo con el periodista Pablo Callejón, Guzzetta hizo referencia a cada uno de las acusaciones y calificó de «mentira absoluta» las manifestaciones de los efectivos policiales que lo incriminan.
«En relación al bombeador, llama la atención la precisión con la que este funcionario realiza la denuncia. Dice que me observa ingresar mi vehículo, desenrosco el bombeador, lo cargo y me pide que no lo haga. Te das cuenta que lo hace para tipificar el delito y esto es completamente falso», sostuvo.
Con respecto al celular que le incautaron al momento de la detención y que habría sido robado del depósito de la dependencia policial, Guzzeta afirmó que «el mismo policía que denuncia lo del bombeador asegura que me vio quitar el teléfono, parece mucha casualidad»
«Al celular lo tenía en mi poder porque fui autorizado por un llamado telefónico del sumariante Mauricio Montaña que responde a la fiscalía. La fiscalía nos autorizó a que lo utilizáramos. En ese momento compré un chip, estamos hablando de hace 2 años atrás. Se crearon grupos de whatsapp con ese número con oficiales, productores y otros vecinos para generar medidas de seguridad. Siempre lo usé para trabajar y jamás lo sustraje de la oficina del depósito», aseveró. Guzzetta aclaró que la autorización del sumariante Montaña «fue telefónica y no por escrito, siempre se da de esa forma».
Al ser consultado sobre la denuncia de una agente de Villa Valeria que asegura haberlo observado quemar documentación en la comisaría, subrayó: «Es totalmente mentira lo que dice esta personal, es otro error que han cometido. Ella habla de combustible pero la facturación y papeles estaban en otra oficina. Eso lo manejaba otro efectivo»
«La declaración estaba preparada para que pensaran que yo obstaculizaba la investigación. Nunca quemé papeles en la comisaría», aseveró.
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Guzzetta también hizo referencia a cada uno de las acusaciones y calificó de «mentira absoluta» las manifestaciones de los efectivos policiales que lo incriminan.
«En relación al bombeador, llama la atención la precisión con la que este funcionario realiza la denuncia. Dice que me observa ingresar mi vehículo, desenrosco el bombeador, lo cargo y me pide que no lo haga. Te das cuenta que lo hace para tipificar el delito y esto es completamente falso», sostuvo.
Con respecto al celular que le incautaron al momento de la detención y que habría sido robado del depósito de la dependencia policial, Guzzeta afirmó que «el mismo policía que denuncia lo del bombeador asegura que me vio quitar el teléfono, parece mucha casualidad»
«Al celular lo tenía en mi poder porque fui autorizado por un llamado telefónico del sumariante Mauricio Montaña que responde a la fiscalía. La fiscalía nos autorizó a que lo utilizáramos. En ese momento compré un chip, estamos hablando de hace 2 años atrás. Se crearon grupos de whatsapp con ese número con oficiales, productores y otros vecinos para generar medidas de seguridad. Siempre lo usé para trabajar y jamás lo sustraje de la oficina del depósito», aseveró. Guzzetta aclaró que la autorización del sumariante Montaña «fue telefónica y no por escrito, siempre se da de esa forma».
Al ser consultado sobre la denuncia de una agente de Villa Valeria que asegura haberlo observado quemar documentación en la comisaría, subrayó: «Es totalmente mentira lo que dice esta personal, es otro error que han cometido. Ella habla de combustible pero la facturación y papeles estaban en otra oficina. Eso lo manejaba otro efectivo»
«La declaración estaba preparada para que pensaran que yo obstaculizaba la investigación. Nunca quemé papeles en la comisaría», aseveró.