Familiares de Sergio Medina, el único imputado por el crimen de Claudia Muñóz, volvieron a protestar para pedir por su libertad y lanzaron duras críticas al fiscal Fernando Moine. La mujer fue asesinada de numerosas puñaladas en su comercio, a media cuadra de la Policía de Abilene, el 9 de mayo último.
ADN
Tras el arribo de los resultados del análisis genético en la campera con restos de sangre, hallada en la escena del crimen, la familia considera que la ausencia de ADN de Medina es prueba de «su inocencia».
«La sangre es compatible con el perfil genético de Claudia Muñoz pero, en relación al material genético masculino, no se puede determinar nada con certeza, por lo que el mismo no resultó apto para el cotejo, es decir, no se halló ADN del imputado», admitió el fiscal Fernando Moine.
El fiscal pidió otros cotejos dé ADN sobre otros lugares donde se encontró sangre en el comercio en el que asesinaron a Claudia.
Medina vive en Las Albahacas, localidad ubicada a 80 kilómetros de Río Cuarto, pero ese día estuvo en la ciudad, en la casa de una tía que vive al lado del domicilio de Claudia Muñoz y sus suegros.