Por el paso Los Libertadores, en Mendoza, hasta ayer habían pasado unas 40 mil personas en auto, y esperaban más para hoy.
La peregrinación coincide, además, con el recambio turístico de vacaciones, que muchos aprovecharon para mezclar con la visita papal, incluso las agencias armaron paquetes a medida, por lo que desde el gobierno nacional estimaron que podían llegar a ser un millón los argentinos que ingresarán a Chile.