Es una iniciativa del Observatorio de Derechos Humanos. Se convocará a representantes de todos los claustros, de las facultades y del Consejo Social para trabajar en el proyecto.
PRENSA UNRC -El Observatorio de Derechos Humanos de la UNRC presentó en el Consejo Superior una propuesta para que se reglamente la licencia laboral para las mujeres docentes, nodocentes y estudiantes que resulten víctimas de violencia de género.
También, anticipó el organismo que trabajará junto con los distintos sectores de la comunidad universitaria y el Consejo Social en la redacción de un protocolo de actuación frente a situaciones de violencia de género que se originen en el ámbito de esta casa de estudios.
El Observatorio de Derechos Humanos, a través de una nota de su coordinadora, Mirta Aromataris, adelantó que realizará una convocatoria a todos los gremios universitarios y a representantes de las cinco facultades para constituir una mesa de trabajo que se encargue de la redacción de ambas iniciativas, las que luego serán ingresadas formalmente al Consejo Superior para su tratamiento.
Sostiene el Observatorio universitario que el proyecto por el cual se impulsa el reconocimiento legal de la licencia laboral por violencia de género tiene como objetivo establecer instancias que promuevan “la igualdad de oportunidades en los ámbitos laborales donde se desempeñan las trabajadoras que atraviesan situaciones de violencia de género, evitando de ese modo la profundización de la desigualdad que el hecho mismo de la violencia genera”.
Agrega: “En la actualidad, las trabajadoras afectadas por situaciones de violencia recurren a licencias inespecíficas para poder tener tiempo para recuperarse de las agresiones, iniciar acciones legales, recurrir a atención psicológica y jurídica, o acceder a contención afectiva. Esas licencias inespecíficas –una de ellas es la licencia con carpeta psiquiátrica, por ejemplo– terminan resultando una pesada carga para las propias trabajadoras ya que, además de invisibilizar la problemática, patologiza y estigmatiza a la mujer”.
“El hecho de nominar a la licencia específicamente por los motivos que la justifican contribuye a evidenciar que la violencia de género no es un problema individual ni atribuible a la trayectoria personal o a las características de su víctima, sino que es un problema socio-estructural que necesita ser prevenido, combatido y erradicado por las diversas instituciones en las que transita esa persona”, señala el Observatorio.
En el año 2016, la Universidad Nacional de Río Cuarto, junto con otras instituciones de educación superior de la provincia de Córdoba estatales y privadas, suscribió la adhesión a la “Red de Universidades por la No Violencia hacia la Mujer”, una iniciativa de la Secretaría de Lucha contra la Violencia a la Mujer y Trata de Personas y del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos del Gobierno de Córdoba.
La Universidad se comprometió a sumar sus capacidades técnicas y profesionales para el desarrollo e implementación de políticas públicas vinculadas a la lucha contra la violencia hacia la mujer.
“La violencia de género constituye la máxima expresión en la violación de los Derechos Humanos a las mujeres, por lo que es importante abordarla desde múltiples enfoques: preventivo, educativo, social, asistencial, laboral, sanitario, penal y procesal”, destaca el Observatorio de DDHH de la Universidad.
Protocolo de actuación
El Observatorio de Derechos Humanos también promueve la elaboración de un protocolo de actuación para situaciones de violencia de género que puedan producirse eventualmente en la Universidad.
Destaca el Observatorio: “Las situaciones que implican violencia de género en el ámbito universitario traen como consecuencia deserción o inestabilidad en el proceso educativo o en las actividades laborales, haciendo necesario contar con recursos sencillos, rápidos y efectivos ante los órganos competentes para reclamar por violaciones a sus derechos fundamentales, implicando esto situaciones de violencia y discriminación a la mujer y a la comunidad LGTTBI (Lésbica, Gay, Travesti, Transexual, Bisexual e Intersexual) y acoso sexual”.
Según el Observatorio de DDHH, las dos propuestas mencionadas tienen por finalidad “generar un debate al interior de la comunidad universitaria en torno de los temas de la licencia y el protocolo de actuación para casos de víctimas de violencia de género a implementar en el ámbito de la Universidad” y “visibilizar la problemática en esta institución educativa brindando herramientas para la prevención y el tratamiento de la misma”.
En este marco, el Observatorio convocará a los gremios de los cuatro claustros de la Universidad (AGD, ATURC, FURC y Graduados), al Consejo Social y a representantes de las cinco facultades. Esto para constituir una mesa de discusión y trabajo para la elaboración de un protocolo para actuar en casos de violencia de género en el ámbito de esta casa de estudios; constituir una mesa de discusión y trabajo para la elaboración de una reglamentación para que se ponga en vigencia la licencia por violencia de género, y presentar dicha propuesta al Consejo Superior para su tratamiento y aprobación.