El ex defensor de Independiente será sometido a juicio oral por el presunto abuso de una joven de 19 años en un departamento en el que estaba con otros futbolistas en la localidad bonaerense de Wilde.
El ex defensor de Independiente Alexis Zárate será sometido a juicio oral por el presunto abuso sexual de una joven de 19 años en un departamento en el que estaba con otros futbolistas en la localidad bonaerense de Wilde en 2014.
La abogada de la víctima, Raquel Hermida Leyenda, informó a Télam que el juez de Garantías de Avellaneda Luis Carzoglio elevó la causa a la etapa de debate oral tras un pedido formulado por ella y la fiscal María Alejandra Olmos Coronel.
«Este sería el primer juicio por abuso sexual contra un futbolista de Primera División», afirmó la letrada en referencia a Zárate (22), que desde comienzos de año juega en Temperley luego de que Independiente lo vendiera.
El jugador, que nunca estuvo detenido por el hecho, está acusado del delito de «abuso sexual con acceso carnal», el cual tiene una pena de 6 a 15 años de prisión.
Hermida Leyenda sostuvo que «hay abundantes pruebas» contra el futbolista, entre ellas las lesiones en los brazos que presentó la joven, constatadas por un médico legista, y mensajes de texto que éste se envió con otros jugadores que esa noche estaban allí.
Uno de ellos era el actual delantero de Independiente Martín Benítez (22), que al momento del hecho tenía una relación de dos años con la víctima, y el jugador de la cuarta división del club Nicolás Pérez (22), quienes declararán como testigos en el juicio pero para Hermida Leyenda deberían estar imputados.
«A Benítez lo denuncié por encubrimiento y a Pérez por falso testimonio porque ellos son cómplices que permitieron que se llevara a cabo el delito. Benítez se hizo el dormido cuando se produjo el abuso», afirmó la abogada.
Un testimonio importante en la causa también lo prestó un hombre que declaró que el padre de Pérez, que trabajaba como remisero, le contó durante un viaje que «era verdad» el abuso en el que se vio involucrado su hijo y que «escuchó gritar a la chica y vio como se defendía».
Además, las pericias psicológicas indicaron que la chica «no fabula, sufre estrés postraumático y tiene todas las características de una víctima de abuso».
La causa había registrado pocos avances, pero se reactivó luego de que en diciembre la querella pidió el apartamiento del fiscal actuante, Guillermo Castro, que a su entender que no estaba impulsando correctamente el caso y por eso el juez no le había lugar a determinadas medidas.
El hecho investigado ocurrió la madrugada del 16 de marzo de 2014, cuando la denunciante, actualmente de 22 años, fue a bailar a un boliche de Quilmes, donde se encontró con Benítez, quien se hallaba en el lugar junto a Zárate y Pérez.
La joven y Benítez se retiraron del lugar y concurrieron al departamento de Zárate, situado en la planta baja «A» de un edificio de la calle Brandsen 5980 de Wilde, partido de Avellaneda, donde mantuvieron relaciones sexuales.
Según la denuncia de la joven ante la Justicia, luego de tener relaciones con Benítez se quedó dormida junto a su novio y escuchó que al departamento llegaron Zárate y Pérez.
La chica aseguró que Zárate se metió en la misma cama donde dormía con Benítez y abusó de ella.
La denunciante detalló que se despertó cuando sintió que la estaban penetrando, que se dio vuelta, vio que era Zárate y que éste le dijo: «¿Vos te cuidás?».
También relató que mientras era abusada ella gritó y trató de despertar a Benítez, quien dormía en la misma cama, pero no logró hacerlo.
La chica dijo que Zárate la tomó fuerte del brazo derecho, que ella forcejeó y que no logró sacárselo de encima hasta que el futbolista eyaculó, se levantó de la cama, se puso el calzoncillo y salió de la habitación.
Por su parte, el jugador sostuvo en su indagatoria que aquella madrugada él mantuvo relaciones sexuales con la chica, pero dijo que fueron «consentidas».