Telam – Una madre a la que le diagnosticaron un cáncer terminal escribió en un cuaderno un relato crudo pero a la vez alegre con todo lo que le hubiera querido decir a su hijo, su historia y la de su familia, en un texto que fue publicado en un libro seis meses después de su muerte y que transmite amor y vida en una suerte de «legado» para sus seres queridos
«El Cuaderno de Nippur», el nombre de su hijo, fue escrito por María Vázquez a quien «la operaron en setiembre del año pasado de un cáncer muy avanzado» contó a Télam Sebastián Corona, su marido, quien aseguró: «Luego de la operación, y sabiendo que los pronósticos no eran buenos, le compramos un cuaderno para que escribiera todo lo que le iba pasando».
La autora del cuaderno murió siete meses después de ser operada, el 21 de abril de este año y durante todo ese tiempo escribió «todo lo que le hubiera querido decir a Nippur, su historia y la de su familia, lo que le gusta y lo que no, y también le da consejos».
El cuaderno «no fue escrito para publicar», sino que la intención era «dejar un legado para su hijo, pero cuando ella estaba internada, dos amigas escritoras lo leyeron y como les pareció muy bueno le pidieron permiso para presentarlo en editoriales. Ella aceptó encantada»
Después de su muerte, las amigas se comunicaron con Sebastián desde la editorial Planeta al tiempo que María «ya se había hecho famosa «por cómo iba relatando su día a día por Twitter, lo que ella contaba se viralizó y llegó a los medios», relató el esposo.
«Ella compartía lo que le pasaba a través de un relato crudo, pero a la vez con amor y humor, y cero solemnidad», dijo Corona y aseguró que «lo principal que ella intentó trasmitir es que lo ama y que está aunque no esté, que va a seguir siendo su mamá. Lo que una madre tiene toda la vida para decirle a su hijo, María lo condensó en un cuaderno».
«Este libro es para cualquiera, trata un tema universal, habla de la vida, de la muerte, del amor. Cualquiera puede sentirse identificado», afirmó el padre de Nippur.
La experiencia de María está «volcada de manera muy personal, se hizo famosa por su manera de encarar la muerte, lo que también habla de su forma de encarar la vida. No es un libro triste, aunque es doloroso, el tono es alegre, divertido y trasmite vida».
«La decisión de publicarlo, que fue de ella, tiene que ver con el deseo de que su presencia acompañe a Nippur siempre», expresó Corona, quien también comentó que el nombre Nippur fue elegido por un personaje de historieta de su infancia, del autor Paraguayo Robin Wood.
«Robin Wood conoció a Nippur cuando vino a Buenos Aires, y cuando María se enfermó, nos acompañó desde la distancia, por eso le pedimos que prologara el libro. Lo que él escribió le pareció tan brillante a la editorial, que lo puso en la contratapa», comentó Corona.