Una decena de organizaciones se suman al Observatorio de Derechos Humanos de la Universidad

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Integrarán el Consejo Consultivo. Este miércoles cierra la convocatoria lanzada por la nueva conducción de la Universidad a principios de este mes. En los próximos días, se realizará la primera reunión que incluirá a los nuevos integrantes.

PRENSA UNRC – Más de una decena de organizaciones y entidades del medio se inscribieron para formar parte del Consejo Consultivo del Observatorio de Derechos Humanos de la Universidad Nacional de Río Cuarto, tras que la nueva conducción rectoral realizara cambios en su estructura de funcionamiento. A partir de ahora, los dictámenes y opiniones de este organismo deberán ser aprobados por el Consejo Superior.
Entre los anotados están la CTA, ATE, la FURC, la organización de servicio a la familia OASIS, la agrupación Dinámica Estudiantil, la Asociación Civil Ex Presos Políticos de Río Cuarto y el Sur de Córdoba, representantes de los distintos claustros de las cinco facultades de la Universidad, la Comisión Municipal de la Memoria, la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación, la Mesa de la Diversidad, profesionales de distintas ramas del medio y organizaciones relacionadas con los derechos humanos.
A principios de mes, el rector Roberto Rovere y el vicerrector Jorge González lanzaron una convocatoria a integrar el Consejo Consultivo, que aseguran se constituirá como “espacio de diálogo, reflexión y toma de posición respecto de situaciones detectadas que pongan en riesgo o violen los derechos de los ciudadanos”. “Asimismo, estará orientado a aportar un diálogo en torno a las políticas públicas, involucrando a actores estatales y de la sociedad civil con la intención de fortalecer la articulación y las acciones en conjunto con todos los organismos de promoción y protección de DDHH”, indicaron.
La convocatoria, que vence este miércoles, tuvo lugar luego de que las autoridades de la Universidad, a través de una resolución rectoral, derogaran otras dos resoluciones rectorales de 2013 y de 2014, que crearon inicialmente el Observatorio de Derechos Humanos de la UNRC y establecían su antigua composición.
Esta nueva disposición, que lleva las firmas del rector Rovere y del secretario general, Enrique Bérgamo, establece “dejar sin efecto” las resoluciones rectorales 485/13 y 1080/14 mencionadas anteriormente. “Constituir el Observatorio de Derechos Humanos de la Universidad Nacional de Río Cuarto, dependiente del Rectorado…”. “Fijar como objetivos primordiales a cumplir por el observatorio de Derechos Humanos de la Universidad Nacional de Río Cuarto, la investigación, estudio, transmisión y enseñanza de las diversas cuestiones vinculadas a los derechos humanos”. “Dotar al Observatorio de Derechos Humanos de la Universidad Nacional de Río Cuarto de una estructura de funcionamiento interno, conformada de la siguiente manera: un Comité Ejecutivo, un Consejo Consultivo del Observatorio, un Comité Asesor, un Consejo Honorario y Comisiones Asesoras no permanentes ad-hoc”.
También, esta resolución fija que “la ejecución de toda actividad concreta que exceda los objetivos principales del Observatorio, y que se realice en base a un dictamen, opinión o parecer de éste, deberá ser aprobada por el Consejo Superior de la Universidad y materializada a través del órgano que estatutariamente tiene a cargo la representación de la UNRC”.
En su articulado, establece también que los miembros de los distintos Consejos y Comités que integran el Observatorio “caducan en sus funciones al finalizar el mandato del actual Rector”.

“Queremos que sea un espacio absolutamente democrático”

La coordinadora del Observatorio de Derechos Humanos de la Universidad, Mirta Aromataris, ex presa política durante cinco años y docente de Ciencias de la Educación, dijo: “Esperamos la participación de muchas organizaciones, porque queremos que sea un espacio absolutamente democrático”. “Este es un espacio abierto para todas las organizaciones y todos los que tienen que ver con los derechos humanos”, sostuvo, al tiempo que no descartó una postergación en la fecha de cierre de la inscripción. En este sentido, indicó: “Hay gente que no estaba antes en el Observatorio y ahora está definiendo su participación”.
Adelantó que en los próximos días se realizará la primera reunión que incluirá a los nuevos integrantes del Comité Consultivo. Dijo: “Vamos a hacer una reunión amplia, de la que va a participar el Comité Ejecutivo, integrado por el rector, el vicerrector, el secretario general, el secretario de Extensión, la coordinadora y sub-coordinadora; el Consejo Consultivo, con la organizaciones que se incorporan, representantes de la facultades, de los gremios de la Universidad, de los alumnos y de los graduados; y el Comité Asesor, integrado por profesionales de distintas ramas del conocimiento”.
Aromataris, que es licenciada en psicopedagogía y master en psicoterapia psicoanalítica, puntualizó: “La Universidad debe ocuparse de los derechos humanos. Lo deben hacer muchas instituciones, pero sobre todo esta que tiene a su cargo la educación. Las problemáticas de los seres humanos tienen que ver con cómo se constituyen como sujetos en relación al respeto de los derechos y al ejercicio de los derechos”. “Todos los problemas que tenemos, maltrato, violencia, robos, abusos, explotación, todos están atravesados por los derechos. Cómo no se va a ocupar la Universidad de los derechos. Es algo fundamental. El horizonte está en crear una cultura de los derechos”, remarcó.
Sobre sus años en prisión, la coordinadora del Observatorio de Derechos Humanos de la Universidad, que en esos tiempos era militante primero de la JP y luego de la JUP, comentó: “Fui presa política, desde el ’77 al ’83. Después salí y terminé de estudiar. Y me apasionó el psicoanálisis. Estudiaba en aquella época Ciencias de la Educación. Cuando salí de estar presa, decidí estudiar psicopedagogía clínica, pero antes de finalizar la carrera inicié estudios de psicoanálisis”.
Aunque conmovida, aseguró: “No tengo problemas en hablar de aquello”. Y contó: “Los momentos más duros fueron los primeros, cuando hubo tortura. Una vez que te sacaban de los lugares donde estaban los torturadores y te llevan a la cárcel empezaba una vida difícil, pero por lo menos acompañada, no en una celda aislada. Aunque en Villa Devoto había castigos en celdas aisladas”.
“No importaba por qué. Había una política de hostigamiento que necesitaba destruirte, entonces siempre había algún motivo para el castigo. A mí la celda de castigo me tocó porque en una siesta, estaba sentada con el uniforme y recosté la cabeza hacia un costado, justo abrió la mirilla la celadora y me llevaron allá. Lo único que había ahí era un elástico de cama y nada más. Si necesitaba ir al baño era difícil que abrieran, había que gritar mucho tiempo”, recordó esta mujer que estuvo en la penitenciaría de Río Cuarto un año y siete meses. De ahí pasó a Córdoba. Y finalmente la trasladaron en avión a Villa Devoto, donde pasó la mayor parte de su detención.
“He visto gente enloquecerse ahí adentro, romper vínculos con la realidad, perder criterio de realidad de un momento para otro. Cosas muy terribles”, dijo Aromataris. Y agregó: “Estoy en este Observatorio por ser docente de esta Universidad, por ser ex presa política, por conocer de la violación de los derechos. El psicoanálisis es la teoría que permite un conocimiento más profundo y más completo del ser humano y del sufrimiento humano. Y eso creo que me va a equipar mucho para trabajar acá, en el Observatorio”.
“Todas la organizaciones, movilizaciones y prácticas en relación a los derechos en general son sostenidas particularmente por las personas que han sido vulneradas en sus derechos, que han sufrido violación de los derechos humanos”, consideró.


Organización interna

En su nueva conformación, el Comité Ejecutivo del Observatorio de DDHH está integrado por el Rector y el Vicerrector de la UNRC; por el Secretario de Extensión y el Secretario General de la Universidad, un coordinador y un subcoordinador del Observatorio elegidos por el Rector.
El Consejo Consultivo, en tanto, tendrá “una composición plural que asegure la representación de los distintos claustros de la Universidad Nacional de Río Cuarto y de las agrupaciones gremiales vinculadas a ellas, y los representantes de las instituciones, organizaciones gubernamentales y no gubernamentales. Tendrá como función principal la deliberación y toma de posición en todo tema vinculado a derechos humanos”.
Estará conformado por un representante titular y uno suplente designado por los respectivos consejos directivos de cada una de las cinco facultades. Además, un representante titular y uno suplente por la Asociación Gremial Docente (AGD), un representante titular y uno suplente por la Asociación de Trabajadores de la UNRC (ATURC), un representante titular y uno suplente por la Federación Universitaria (FURC), un representante titular y uno suplente por las organizaciones de Graduados de la UNRC, y un representante de las distintas organizaciones, instituciones, partidos políticos, ONGs, fuerzas vivas de la ciudad y de la región que quieran formar parte de este Consejo Consultivo, para lo cual deben inscribirse previamente.
Por su parte, el Comité Asesor tendrá como función principal “asesorar técnicamente y de manera permanente al Comité Ejecutivo del Observatorio, y estará integrado por profesionales de distintas especialidades, entre ellos: un médico, un abogado, un trabajador social y un psicólogo.
El Consejo Honorario estará integrado por aquellas personas que hayan sido investidas con el título de Doctor Honoris Causa por la Universidad Nacional de Río Cuarto y que tengan intenciones de formar parte de dicho Consejo. Su función principal será la de “convertirse en el garante moral y ético del cumplimiento de los objetivos y principios, y brindar asesoramiento a las restantes estructuras de funcionamiento del Observatorio, cuando le sea requerido”.
Y las Comisiones Asesoras No Permanentes Ad-Hoc serán convocadas por el Comité Ejecutivo para dar tratamiento a temáticas específicas que surjan de las deliberaciones del Consejo Consultivo, y los integrantes durarán en su función hasta la elaboración del informe que le diera origen.

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