Tras indagarlo, el fiscal dictó la falta de mérito al primer sospechoso y al mismo tiempo ordenó la detención de otras dos personas. El abogado de Sosa cuestionó en duros términos a Zuin: «El padre de Sosa tuvo que hacer la tarea que no hizo la Policía».
Según relató el padre de Fabián Sosa, a su hijo lo detuvieron tras un burdo engaño. La Policía los habría citado para «devolver la moto secuestrada» y cuando llegaron a la Departamental les dijeron que el joven de 19 años «estaba detenido». El hecho ocurrió 3 horas antes de la marcha para reclamar Justicia por el brutal ataque a Meli Gonzales, quien recibió 15 puñaladas y cortes y se encuentra con pronóstico reservado.
Hoy, Sosa vivió otro día de confusión que terminó con su excarcelación. El joven debió enfrentar un sorprendente contexto en el que pasó de principal sospechoso a convertirse en el perejil de la causa. Mientras el fiscal de Instrucción Javier Di Santo lo indagaba, se ordenaban allanamientos en los domicilios de otros dos jóvenes, mayores de edad, uno de ellos con antecedentes penales. Los nombres y fotografías de los nuevos implicados habían sido aportados por el padre de Sosa y su abogado, tras recibir el aporte de un testigo.
Luego de explicar lo que hizo la jornada del ataque y ante la falta de pruebas que lo involucren con el hecho, el fiscal decidió liberarlo y otorgarle la falta de mérito, el paso previo al sobreseimiento.
Los nuevos sospechosos fueron detenidos y esta vez, según afirman desde Tribunales, se hallaron efectivamente elementos que los comprometen seriamente: una moto similar a la descripta por los testigos, ropa con sangre y otras pertenencias. Además, la descripción física de los sospechosos coincide con lo descripto por Melisa antes de que quedara en coma farmacológico, en la Terapia Intensiva del Policlínico San Lucas.
La joven había dicho que intentaron besarla y tocarla y al negarse, los agresores comenzaron a apuñalarla. La versión intentó ser desestimada por la Policía, aunque la nueva línea de investigación corroboraría sus manifestaciones. El fiscal por ahora sostuvo la imputación de tentativa de homicidio agravada por ensañamiento, aunque no descartaría sumar la acusación por abuso.
Los dos detenidos serán indagados este jueves y la Justicia local sumó otro perejil en una larga lista de traspiés que condicionan su presente y su historia reciente.
«Daños cerebrales»
Alejandra, la madre de Melissa Gonzalez, confirmó que le realizaron la tomografía a la joven de 17 años y corroboraron que «hubo daño cerebral» tras el brutal ataque a puñaladas ocurrido en calles Berutti y Marcelo T. de Alvear, en Banda Norte.
La mujer resaltó en diálogo con Telediario que en las próximas horas «comenzarán a despertarla para conocer las secuelas neurológicas» que provocó la agresión.
Admitio que Meli aún continúa con pronóstico reservado y que «van a probar quitarle el respirador artificial».
«Sabemos que va a enfrentar una larga recuperación y los médicos nos prepararon para eso. Lo que hoy valoramos es tenerla estable y con vida», subrayó.