Ocurrió este jueves en Sucre al 300, en el sur de la ciudad. El persistente olor a gas preocupó a los vecinos, quienes dieron aviso a la policía. Al llegar al lugar, los efectivos descubrieron que el propietario de un galpón estafaba a una empresa distribuidora de gas y a personas que le compraban.
El olor alertó a los vecinos, quienes le dieron aviso a la Policía.
Tras llegar al lugar, la policía descubrió que en un galpón ubicado en Sucre al 340, en el sur de la ciudad, un empleado de una empresa distribuidora de gas, traspasaba el contenido de las garrafas que se venden a precio subsidiado a tubos de 45 kilogramos que luego comercializaba de forma particular.
Según se informó desde la Unidad Departamental, el hombre, identificado como Guillermo Ducco (40), distribuía gas en la zona para una empresa de la ciudad. En los viajes, habría comprado para él las garrafas subsidiadas y a los clientes de la empresa les habría los cilindros de 45 kilogramos que él mismo llenaba.
«En principio, se trataría de una doble estafa: en primer lugar hacia la empresa, porque les habría utilizado la cartilla de clientes y se además se habría quedado con las garrafas; y también habría estafado a los clientes porque los cilindros no tenían el peso que él decía que tenían», señalaron desde la Unidad Departamental.
Durante el operativo llevado adelante por la Policía se secuestraron 75 garrafas de 10 kilogramos; 15 de 15 kilogramos y algunos cilindros de 45 kilogramos; también precintos, tapones, conectores y una pistola de calor.
La Municipalidad dispuso la clausura del galpón debido a que no presentaba ningún tipo de habilitación para realizar las actividades que realizaba.
El hecho ahora es investigado por la Justicia.
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