La pareja llevó a la menor al hospital argumentando que había sufrido un accidente doméstico. Los estudios confirmaron que tenía «múltiples signos de violencia física y sexual». Ambos fueron detenidos
Buenos Aires – Hematomas en todo el cuerpo, que predominan en cara, dorso, brazos, pelvis y ambas caras laterales del fémur proximal, además de un cefalohematoma en el parietal derecho y parieto-occipital izquierdo, abdomen distendido, lesiones genitales, fractura de cúbito y radio de lado izquierdo en vías de consolidación y fractura ya consolidada en el brazo derecho. Además de fractura de las costillas de lado derecho, líquido abdominal y lesión en el riñón.
En ese estado llegó la menor de 3 años al Hospital Larraín, adonde su madre y su padrastro la llevaron la tarde del miércoles denunciando que se había caído mientras comía, según confirmó Reinaldo Reimondi, director ejecutivo del Hospital de Niños de La Plata. Tras ser atendida en la guardia se la derivó al Hospital de Niños Sor María Ludovica por la gravedad del cuadro clínico que presentaba.
El Ministerio de Salud bonaerense confirmó ayer en un comunicado que «los directivos de ambos establecimientos realizaron la denuncia al detectar múltiples signos de violencia física y sexual».
La mujer, de 21 años, llegó junto al hombre, de 30, al hospital de Berisso diciendo que su hija, quien estaba inconsciente, se había caído mientras comía. En ese centro asistencial sufrió un paro cardiorrespiratorio que complicó su cuadro general, por lo que se decidió trasladarla al Hospital de Niños.
Los médicos constataron luego que la niña había sido golpeada en forma brutal y que algunas de las heridas no eran recientes. A raíz de la denuncia, la madre y el padrastro, quienes tienen un bebé de nueve meses y habitan una vivienda precaria en Altos de Los Talas de Berisso, fueron detenidos en el mismo hospital.