El pasado 26 de junio se celebró el Día Internacional de la Lucha contra el Consumo de Drogas y en ese marco la División Adicciones de la Municipalidad anunció un refuerzo en las actividades preventivas con los jóvenes y sus padres.
“Es importante visualizar el problema y no meterlo bajo la alfombra. Este municipio viene trabajando con jóvenes líderes que actúan como agentes multiplicadores. En estos últimos meses ponemos el acento en trabajar con los padres o los adultos que son referentes de los chicos”, explicó la experta en el tema Lic. Lilian Jaule.
Según la profesional cuando un joven consume estupefacientes seguramente es porque hay un adulto desinformado o porque lamentablemente se naturaliza el consumo de drogas, ya sean legales o ilegales. “De allí la importancia de que los padres se involucren en este tema”, aseguró.
El alcohol: Puerta de inicio
Jaule dedicó un párrafo especial también al consumo de alcohol, al que calificó como droga “precursora”.
“Generalmente actúa como una puerta que conduce a otros consumos, como el de la marihuana o la cocaína. Lo que no queremos es que no se naturalice el hecho de tomar entre los jóvenes. Pretendemos que si los padres observan a su hijo en el consumo excesivo de alcohol que no lo admitan como algo normal”, advirtió.
Información errónea
Jaule explicó que existen casos de muchos que experimentaron con marihuana por creer equivocadamente en ciertas virtudes, tras oír falsas propagandas.
“Está comprobado que es una información errónea porque solo genera daño, genera adicción y un sin fin de problemas sociales. Sin embargo algunos chicos la pueden consumir a modo recreativo o experimental pensando que les puede dejar algo positivo. Eso puede desencadenar un inconveniente muy serio. Justamente queremos trabajar con los papás porque hay muchos padres que pueden creer este mismo discurso y en esos casos la información o la prevención es lo más valido”, sostuvo.
Observar las conductas
Es importante que los padres sepan que a veces un hijo puede actuar diferente de como lo hace en la casa ya que también existe la presión de grupo. Significa que se ven empujados a experimentar por una supuesta inclusión. “Los jóvenes que no tienen una personalidad conformada pueden acceder por temor a no pertenecer a un determinado círculo de amistades o contactos”.
Según Jaule los indicadores que marcan que un adolescente puede estar consumiendo alguna droga son que invariablemente vuelva alcoholizado de las fiestas o reuniones a las que asiste o un permanente desgano o abandonado.
“Una conducta abúlica puede ser un indicio de consumo y si los padres están atentos a esos cambios deben informarse y solicitar ayuda rápidamente”, advirtió Jalue.
En el municipio hay 2 lugares puntuales en donde asesorase:
– Centro de Salud (Cabrera 1.322). Tel. 4671300.
– División Adicciones (La Rioja 151).Tel 4671447.