El pasado miércoles, la madre de un joven al que quisieron balear, anticipó a Telediario el crecimiento de la violencia entre las bandas de las 130 viviendas y Jardín Norte. También lo había señalado la presidenta de la vecinal.
A pesar de la advertencia de vecinos, no se evitó la muerte de un joven en barrio Mugica.
El pasado miércoles, la madre de un joven al que quisieron balear, anticipó a Telediario el crecimiento de la violencia entre las bandas de las 130 viviendas y Jardín Norte.
«A cualquier hora, todos los días, se escuchan tiros. A mi hijo intentaron balearlo dos veces», relató Deolinda Gallo, vecina de las 130 Viviendas, quien describió los dramáticos episodios.
La disputa es protagonizada por jóvenes de 15 a 30 años, quienes residen en los barrios al norte de la ciudad.
«Nos les importa si hay niños ó ancianos. Viven a los tiros. El domingo mi hijo iba en bicicleta y comenzaron a dispararle. Una mujer gritaba que dejaran de tirar porque había chicos en la calle. Por suerte no le pegaron, pero estaba desesperado», relató la mujer.
Deolinda recordó que ayer otro tiroteo los sorprendió cuando volvía con su familia al hogar, en un pasaje público próximo a la ruta.
«Antes se encontraban los chicos y paseaban en bicicleta. Ahora mis hijos no quieren salir, tienen miedo. No encuentran espacio donde entretenerse. Somos gente de trabajo, no merecemos esto», se lamentó.
Aunque han realizado numerosas denuncias, la problemática se repite y afirman que «la policía pasa muy poco».
Por su parte, Graciela Correa, presidenta de la vecinal Jardín Norte, admitió que «son episodios terribles»
«La situación nos preocupa y genera temor», expresó la vecinalista.
Añadió que «se han intentado muchas alternativas para que los chicos abandonen la calle, pero ellos necesitan de recursos y no consiguen trabajo».
«El tema de las drogas es muy complicado y nos sentimos muy solas en esta lucha», aseveró.
