Salud y mujer

0
Compartir

En tiempos actuales, ciertas mujeres pertenecientes a la población de la sociedad argentina y local, están cada vez más exigidas por múltiples factores.

El éxito laboral  y la optimización de las relaciones familiares entre pares e hijos, son algunos de ellos. Horarios laborales extendidos sorpresivamente, generan factores de sorpresa que afectan a la salud física y mental de la misma. Pero vayamos a lo que nos convoca, que es dar datos de estadísticas sobre las enfermedades que están en primera instancia afectándolas.

Veamos: crece el cáncer de pulmón y la violencia familiar con todas las connotaciones que esta última conlleva: género, femicidio, matricidio, acosos laborales, etc.. Todo esto altera el equilibrio corporal y psíquico; como consecuencia aumentó el consumo de tabaco llegando a alcanzar el nivel del hombre. En las mujeres adultas, las enfermedades prevalentes son las cardiovasculares (infartos, accidente cardiovascular, insuficiencia cardiaca). La mujer muere más que el hombre por enfermedad cardiovascular. Por múltiples causas: vive más y tiene la idea de que no le va a suceder, entonces se cuida menos. Además, es mucho más sedentaria e hipertensa, lo que conduce a que tenga más accidente cerebrovascular hemorrágico. De acuerdo con una encuesta, las mujeres identifican el SIDA, el Alzheimer y los cánceres de mama y de pulmón como las enfermedades que más las afectan. Y entre las causas de mortalidad mencionan los accidentes, el SIDA y el Alzheimer. Con respecto al SIDA, en este momento falta información, sobre cómo ejercer la sexualidad saludablemente y sobre métodos anticonceptivos, incluido el preservativo, y su utilidad para evitar la transmisión del VIH, que infecta cada día a cinco mujeres argentinas. En las mujeres de entre 20 y 39 años, la tasa de diagnósticos llega a cuadruplicarse. Se estima que un 40% de las mujeres con VIH desconocen su situación.

Obviamente que la educación tiene un largo camino que recorrer en transmitir, desde el área de educación que se imparte en los colegios, mayor información sobre todo para evitar embarazos adolescentes y relaciones sexuales promiscuas sin la protección adecuada; en la población más vulnerable, el aborto y muertes maternales también aumentaron. Dentro de la salud mental predomina el distress y depresión que atraviesan el cuerpo de la mujer con una consecuencia seria como es la hipertensión.

La falta de protección de los contextos pertinentes más las vulnerabilidades propias de la mujer, son las causantes de todos estos trastornos. Para terminar algunos datos estadísticos sobre las muertes femeninas ocurridas en el año 2011: el cáncer es la segunda causa de mortalidad. De las 153.922 mujeres que murieron en 2011, 5422 defunciones fueron por cáncer de mama, 3068 por tumores de colon, 2712 de pulmón (que crece más en las mujeres que en los hombres) y 2543 de útero.

Creo con lo dicho, las mujeres debemos cambiar nuestro estilo de vida, ya que no obstante las campañas sobre las causas de muertes éstas, por los datos expuestos, todavía no alcanzan para evitar el flagelo. Una toma de conciencia y una atención aún más intensa en las poblaciones vulnerables, sería la primera estrategia para comenzar a abordar y disminuir estos datos. Depende del Estado, pero mayormente de nosotras mismas.

 

LIC ELENA FARAH

Commentarios

commentarios

Compartir