Se espera un nuevo aumento de lácteos y de la carne y en los comercios de la ciudad escasean estos productos.En el caso de la leche se estima un aumento de un 8 o un 10 por ciento, aunque algunos comerciantes creen que la suba estaría alrededor del 15 por ciento. Los lácteos subirían un 10 o 12 por ciento y los quesos un 8 por ciento.
La suba de los precios en productos derivados de la leche contrasta con la difícil situación de los productores tamberos, muchos de ellos han debido dejar su actividades por los altos costos y los pocos réditos.
En el caso de las carnes, las ventas han bajado debido al notable incremento registrado desde el inicio de la devaluación. El negocio parece estar en la exportación y por ello hay un precio en el mercado interno muy alto y poco accesible para los compradores locales.
Según estimaciones de comerciantes podría haber una suba en los distintos cortes aunque no se precisó el porcentaje.