Un comerciante de armas aseguró que son mayores los controles en las ventas, pero admitió que «nadie sabe cuántas armas ilegales circulan».
Es crítico el estado de Matías Bustos, el niño de 14 años baleado por un amigo cuando se hallaba en una vivienda de Pirovano al 690. Matías permanece en coma, internado en Terapia Intensiva del Nuevo Hospital.
La familia había manifestado que al pequeño “le pusieron el arma en el ojo y le dispararon” y consideraron que “fue a propósito”
Matías se encontraba en el patio junto a un grupo de jóvenes que manipulaban un arma de fuego calibre 32, aunque su tía, Paola Escudero, advirtió en diálogo con Telediario que “él había llegado para hablar con otro chico, pero no estaba jugando con ningún arma”.
“Mi sobrino está muy grave, en coma. Había salido a las 14,45 de su casa cuando ocurrió el hecho, recién había terminado de almorzar”, sostuvo.
Añadió que “fue a comentar algo que pasó con el primo y allí le dieron, pero no fue un juego, fue a propósito”.
“Estaban jugando los chicos, habían estado gatillando varias veces pero cuando Matías llega, le ponen la pistola en el ojo y le pegan”, aseveró.
La mujer dijo que se enteraron por lo sucedido a través de un mensaje de texto y que fue trasladado en una moto “por amigos” al Hospital.
Federico Arias, de 19 años, está detenido y acusado de tentativa de homicidio por haber efectuado el disparo. Fue una de las dos personas que derivó a Matías.
Controles
Esta mañana, Roberto Aguado, un comerciante con larga trayectoria en la venta de armas para actividades deportivas, aseguró en diálogo con Telediario que son mayores los controles, aunque admitió que «nadie sabe cuántas armas ilegales circulan».
«Para que una persona adquiera legalmente un arma debe ser legítimo usuario. Esto implica un psicofísico, pruebas de tiro y completar el pedido de antecedentes penales», resaltó.
Añadió que «el vendedor colabora en la gestión pero el que decide es el organismo responsable».
«Ahora, hay más controles hasta para la venta de balas y se requiere una tarjeta de consumo», subrayó.
El comerciante opinó que «el arma es un instrumento peligroso si no se conoce como manejarla».
«No sabemos qué porcentaje de armas ilegales existen, pero esta problemática preocupó siempre. Si existe una pistola sin papeles es un riesgo y una responsabilidad de los padres», formuló.