Desde calle Estado de Israel hacia el sur se multiplican los hechos de inseguridad. «Entró como un cliente y parecía tranquilo», dijo la víctima al describir al ladrón.
Tras el asalto a una farmacia ubicada en calle Estado de Israel al 1.500, crece la preocupación en el sector por los reiterados hechos de inseguridad.
El último atraco se produjo en la tarde de ayer, a las 19 horas, cuando Mirna Peralta, encargada de la farmacia, fue sorprendida por un sujeto que «entró como un cliente y parecía tranquilo».
En el lugar hay fuertes controles de seguridad, con un enrejado de la puerta principal, pero la mujer creyó que «no se trataba de una persona peligrosa»
«Entró muy tranquilo, me saludó y se dirigió a un exhibidor con productos para bebés. Después quiso pasar al mostrador y sacó una cuchilla. Me empiezo a alejar y me grita que no me vaya. Cuando logro escapar para pedir ayuda, él quedó adentro», relató.
Añadió que «este hombre sacó la plata y como gritaba, llegaron los vecinos que llamaron a la Policía».
«Este joven escapó y una vecina lo persiguió en el auto por Roque Saenz Peña, en contramano, aunque se pudo escapar», formuló.