Nobel para los científicos que investigaron el impacto de las células madres

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Foto: Nachito, el niño riocuartense sometido a un tratamiento con células madres en China.

El Nobel de Medicina 2012 fue para dos científicos que le ganaron al desaliento. Que siguieron adelante pese a las opiniones negativas de los demás. Ellos son el británico John Gurdon y el japonés Shinya Yamanaka, que recibirán el premio por haber descubierto que “las células maduras pueden ser reprogramadas para convertirse en pluripotentes”, según anunció ayer el Instituto Carolina de Suecia Los científicos hicieron sus descubrimientos por separado y en diferentes tiempos.

¿Qué son las células madre?

Son células que no tienen ninguna estructura de tejido específico que les permita realizar funciones especializadas, y que se renuevan ilimitadamente. Bajo ciertas condiciones fisiológicas o experimentales, son capaces de dividirse y pueden dar lugar a tipos especializados de células.

¿Cuántos tipos existen?

Tres. Las células madre embrionarias derivan de embriones y pueden convertirse en cualquier tipo de célula del cuerpo, porque son pluripotentes. Luego, están las células madre adultas, por lo común generan los mismos tejidos del órgano en el cual residen, y su función es la de mantener y reparar el tejido en el que se encuentran; por ejemplo, una célula madre adulta de sangre situada en la médula da lugar a glóbulos rojos, glóbulos blancos y plaquetas. En tercer lugar, están las células pluripotentes inducidas, que se obtienen a partir de células adultas y pueden dar origen a células con otras funciones.

¿De dónde se obtienen?

Las embrionarias se obtienen de los óvulos fertilizados in vitro en clínicas, y donados con fines de investigación, con el consentimiento informado de los donantes. Los embriones de los que derivan son una bola hueca microscópica de células. En cuanto a las células madre adultas, se hallan entre células diferenciadas de un tejido u órgano: el cerebro, la médula, la sangre periférica, los vasos sanguíneos, el músculo esquelético, la piel y el hígado.

¿Cuáles son entonces sus aplicaciones clínicas potenciales?

La investigación apunta a terapias celulares para tratar enfermedades –medicina regenerativa–, como las cardíacas, Parkinson, Alzheimer, lesión traumática de la médula espinal, pérdida de la visión y de la audición, diabetes y artritis reumatoide.

¿Se ha demostrado su eficacia en alguna terapia?

En procedimientos estandarizados sólo se aplica en leucemias y linfomas. Las células pueden ser tomadas de la médula ósea del paciente, de un donante, o de banco de cordones umbilicales.

La esperanza de Nachito

Ignacio, el niño riocuartense que padece encefalopatía crónica no evolutiva, se convirtió en un ejemplo de la expectativa que genera la intervención con células madres, aún cuando algunos métodos actuales aparezcan cuestionados.
Los padres del pequeño lograron reunir los 28 mil dólares que costó el tratamiento en China, a partir del aporte solidario de los riocuartenses y la recaudación en eventos realizados en la ciudad.
Daniela, la mamá de Nachito, señaló que el menor de 2 años fue  sometido a estudios previos que exige el tratamiento en el país asiático y confió en la recuperación de su hijo.
Ignacio nació el  26 de julio del año 2010, con muy bajo peso y 7 meses de gestación. Permaneció internado por 47 días en una clínica de la ciudad hasta que obtuvo el alta. A los 25 días sufrió una convulsión en su casa y fue reingresado a Terapia, donde permaneció 15 días hasta que le dieron el alta nuevamente. A los 7 días sufrió una descompensación y los médicos le diagnosticaron encefalopatía crónica no evolutiva.
“Hay mucha gente que todavía no entiende la propuesta y hasta la critican, pero es una metodología cada vez más utilizada y confiamos en que ayude a mi hijo”, expresó el papá de Ignacio.

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