La medida generó una inédita disputa. Mientras el municipio avanzaba en el concurso, el presidente del Concejo Deliberante, Claudio Miranda, presentaba un proyecto similar en el parlamento local.
El Ejecutivo avanza en un concurso para determinar el ingreso a planta permanente de la Municipalidad a 43 empleados con capacidades diferentes.
La medida generó una inédita disputa interna, debido a que al mismo tiempo el presidente del parlamento local, Claudio Miranda, presentaba un proyecto para concretar una ordenanza.
Los trabajadores ingresarán a través de un concurso cerrado. Actualmente se desempeñan como contratados, en cumplimiento con la normativa vigente exige un cupo del 4 por ciento para discapacitados.
En los fundamentos, Miranda señaló que «en las históricas sesiones del Concejo Deliberante de los años 2007 y 2008 se aprobaron los dispositivos que establecían la incorporación de personas con capacidades diferentes al ámbito de la Administración Municipal de Río Cuarto»
«Cuando se avanza en el sentido de consolidar esta política de garantías a la igualdad de oportunidades, de gozar de los mismos derechos, resulta muy auspicioso y gratificante que las personas con discapacidades no solo ingresen y trabajen en la Administración Pública Municipal, sino que además adquieran la estabilidad que les permite a ellos y a sus familias la certeza que otorga la continuidad laboral más allá de los vaivenes y cambios de la política y de quienes ejercen las funciones públicas», indicó.
El edil sostuvo que «todos valoramos lo que representa el trabajo en nuestras vidas, este articulador central de la sociedad sobre la base del cual se satisfacen demandas y necesidades, se proyecta: la vida, la cultura, la educación, la salud y el desarrollo personal de los individuos y de la comunidad en su conjunto»
«La estabilidad genera la apropiación de un lugar para el desenvolvimiento de las aptitudes y capacidades personales hacia una dirección en que cobra sentido la existencia», manifestó.
Miranda recalcó que «estas personas estan dotadas de un inmenso cariño que distribuyen dilapidadamente entre nosotros sin contraprestación alguna y que en muchísimas circunstancias sufren la discriminación por exteriorizar malformaciones físicas, disminuciones psicomotrices o disfunciones cognitivas a las cuáles les garantizaremos el goce y ejercicio de derechos»