La Cámara Primera del Crimen ordenó al fiscal Julio Rivero que investigue la huída de la policía de José «Pepe» Vargas el 15 de septiembre de 2008, un día después que se constatara la desaparición de Nicolás Sabena.
Vargas y su familia están imputados en la causa, aunque permanecen en libertad. En la quinta de los acusados estuvo Nicolás hasta que se perdiera todo rastro de su paradero.
Rosa Sabena habría advertido en el expediente el dato sobre la huída y detención de Vargas, un episodio que los fiscales Walter Guzmán y Julio Rivero no habrían profundizado.
Para la mujer el hecho podría tener vinculación con la desaparición de su hijo y el fiscal de Cámara Alejandro Cabrera ordenó a Rivero que investigue lo sucedido.
Los policías Villegas y Cazzola habrían corroborado que aquella noche les llamó la atención la actitud de Vargas Miserendino. Tras huir de un móvil policial, el acusado se habría ocultado en una construcción abandonada y allí lo encontraron «muy nervioso»
El doctor Jorge Valverde dijo que «el fiscal ya ha tomado testimonio a los policías que actuaron en el hecho y al propietario de la vivienda donde estuvo Vargas y ahora deberá evaluar si hay algo más por investigar».
Sostuvo que «este hecho no altera ni cambia absolutamente nada» y recalcó «es un hecho contravencional y nada más»