«La historia de pueblo del Paraguay ha estado signada por siglos de opresión por parte de las oligarquías que controlan la tierra, se apropian de la producción colectiva de las mayorías populares, sumiendo a éstas en la miseria y en el dolor cotidiano…», indicó el Rector en un documento.
Desde la Universidad Nacional de Río Cuarto emitieron un comunicado en el que repudió la destitución de Fernando Lugo como presidente de Paraguay.
«Esto constituye un duro golpe a los procesos de democratización social tanto del Paraguay como de una amplia región latinoamericana, constituyéndose en un golpe de Estado Parlamentario», se indicó.
Desde la casa de altos estudios señalaron que «para los sectores que concentran el poder y la riqueza, la profundización de la democracia y su necesario correlato consistente en la democratización al acceso a los bienes (para que dejen de ser de unos pocos y se conviertan en bienes comunes) son sus enemigos principales».
Documento c0mpleto:
La destitución del Presidente Constitucional Fernando Lugo de la República del Paraguay constituye un duro golpe a los procesos de democratización social tanto del Paraguay como de una amplia región latinoamericana, constituyéndose en un golpe de Estado Parlamentario.
Que en este sentido se han pronunciado condenando esta destitución los Presidentes de los Estados de la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR), tanto de nuestra República Argentina, como de la República del Ecuador, de la República Bolivariana de Venezuela y del Estado Plurinacional de Bolivia. Se suman a esta enérgica condena los países integrantes de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA).
La historia de pueblo del Paraguay ha estado signada por siglos de opresión por parte de las oligarquías que controlan la tierra, se apropian de la producción colectiva de las mayorías populares, sumiendo a éstas en la miseria y en el dolor cotidiano.
El «Informe Nacional de Desarrollo Humano» del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) del 2008 sostiene que «En términos de ingresos, el 10% con mayores ingresos de la población concentra el 40% de los ingresos totales y el 40% de menores ingresos el 12%. Expresado en otros términos, el ingreso de una persona del 10% más rico de la población es 31 veces el ingreso de una persona del 10% más pobre. Con relación a la distribución de tierras rurales, el Paraguay es uno de los países de mayor desigualdad en la distribución de tierras rurales en el mundo: el 1% de las exportaciones de más de 1.000 hectáreas concentra el 77% de la superficie total de las tierras rurales»
Esta brutal desigualdad social del Paraguay no es la resultante de las «condiciones naturales» sino de la decisión política de las élites paraguayas que han decidido que las mayorías populares de este país vivan historia y presente bajo la forma de la tragedia.
Para los sectores que concentran el poder y la riqueza, la profundización de la democracia y su necesario correlato consistente en la democratización al acceso a los bienes (para que dejen de ser de unos pocos y se conviertan en bienes comunes) son sus enemigos principales.
Nos solidarizamos con el pueblo paraguayo, nos pronunciamos en contra del golpe de Estado en Paraguay y a favor de una América Latina con justicia social y ambiental.
Rectorado de la Universidad Nacional de Río Cuarto