ANTICIPO TD – Lo dijo Eliana Alcaráz, la titular de ATTTA, tras la aprobación de la Ley de Identidad de Género. Anoche recibió el llamado del intendente Jure, quien la felicitó por la aprobación de una norma que impone a la Argentina a la vanguardia de la defensa de los derechos gays en Latinoamérica.
Acompañada por dirigentes de la CHA y LGBT, Eliana Alcaráz se sumó al grupo de referentes nacionales en la lucha por los derechos homosexuales y celebró la creación de la Ley de Identidad de Generó, aprobada por amplia mayoría en el Congreso.
La titular de ATTTA fue la principal impulsora del registro de uniones civiles en Río Cuarto y logró que por primera vez se habilitara una oficina municipal para receptar los reclamos de travestis. Anoche recibió el llamado del intendente Juan Jure, quien la felicitó por la aprobación de una norma que impone a la Argentina a la vanguardia de la defensa de los derechos gays en Latinoamérica.
– Con la ley se terminan los largos procesos judiciales para reclamar el cambio de nombre y de sexo. ¿Usted ha dedicido concretar estas medidas?
– Junto a dos compañeras estamos pensando en el cambio de nombre. En nuestra ciudad hay 25 chicas travestis y consideramos que todas tomarán la decisión.
– ¿También se someterá a la operación de cambio de sexo?
– Quiero realizar el cambio de sexo y quiero hacerlo en el Hospital de Río Cuarto. No lo había decidido antes porque en la Argentina no se podía concretar y los costos eran muy altos en el exterior. Nunca fui varón, sino que nací en un cuerpo prestado y es hora de corregir esta situación.
– ¿Había realizado consultas en otro país?
– Hice las consultas en Chile. Queria reunir el dinero pero los costos eran muy elevados. Ahora, mi objetivo es operarme en el Hospital de Río Cuarto.
– ¿Otras trasvestis también decidieron someterse a la operación de cambio de sexo?
– Son tres las travestis en Río Cuarto que han tomado la decisión. Con ellas hemos hablado muchas veces de este sueño anhelado y ellas han sido clave en este proceso de lucha.
– ¿Cómo vivió la sesión en la que se aprobó la Ley de Identidad de Género y que tuvo a las organizaciones que esperaban fuera del Congreso como protagonistas excluyentes?
– En todas ha generado una reflexión muy importante. Escuchamos los votos favorables y sentimos la satisfacción de saber que nos devolvieron un derecho que fue robado a toda la comunidad trans. Ahora va a poder descansar en paz Ariel Alcaráz y nacerá Eliana Stefanía Alcaraz.
– ¿Tiene decidido casarse después de la frustración que significó la unión civil en la que fue citada con su nombre de varón?
– En diciembre me voy a casar con la libertad de contar con el nombre que elegí y no el que me impusieron. Me voy a sentir realizada. Ayer, el intendente Juan Jure, el presidente de EMOS Carlos Ordóñez y el responsable de Derechos Humanos Walter Torres me llamaron para felicitarme.
– Muchas veces las leyes emergen como una respuesta tardía a reclamos sociales. Hoy, la Argentina está a la vanguadia de los derechos sociales, pero la ejecución de la norma podría confrontar con las condiciones hospitalarias y los reparos culturales ¿Cree que habrá una rápida ejecución de la Ley?
– Los hospitales deberán estar preparados y creo que el Hospital de Río Cuarto tiene las condiciones necesarias, pero siempre que hay un proceso nuevo se necesita una adaptación. La readecuación genital implicará la formación y capacitación de los especialistas. Se que lo van a hacer porque en esta lucha siempre hubo un acompañamiento. También queremos que nuestras jóvenes puedan tomar las hormonas adecuadas y no se implanten siliconas que provocan altos riesgo.
– La Ley apunta no solo al reconocimiento de la identidad sino a promover derechos como el trabajo, la salud y la educación. ¿También esperan cambios abruptos en la sociedad?
– Por más que tengamos un DNI, algunos empresarios ó parte de la sociedad seguirán con la misma postura. Necesitamos un apoyo de diferentes organismos para que se respete nuestra identidad y que observen que estamos capacitadas para educarnos. No queremos que nuestras compañeras mueran en las esquinas ó las rutas, sino que tengan la oportunidad de una vida mejor.
Por Pablo Callejón (callejonpablo@yahoo.com.ar)
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