La presidenta Cristina Fernández de Kirchner reivindicó «la actitud» de la embajadora Alicia Castro, quien preguntó al canciller inglés si su gobierno estaba dispuesto a dialogar sobre la soberanía de las Islas Malvinas.
La Presidenta aseguró que «es insostenible en cualquier parte del mundo la negativa al diálogo» al referirse a la actitud del gobierno británico ante la soberanía de las Islas Malvinas. Fue al inaugurar el «Patio Malvinas Argentinas»en Casa de Gobierno.
La presidenta Cristina Fernández de Kirchner reivindicó «la actitud» de la embajadora Alicia Castro, quien preguntó al canciller inglés si su gobierno estaba dispuesto a dialogar sobre la soberanía de las Islas Malvinas, y exhortó a que se cumplan las resoluciones de la ONU sobre la cuestión, asegurando que «se torna francamente insostenible la negativa al diálogo» por parte de Gran Bretaña.
Cristina, durante el acto en que inauguró el «Patio Malvinas Argentinas» en la Casa de Gobierno, sostuvo que «la Argentina siempre fue un país de paz», en tanto que valoró la actitud de la embajadora en Gran Bretaña, quien ayer preguntó al canciller inglés, William Hague, cuándo su país iba a respetar las resoluciones de ONU para dialogar por la soberanía de Malvinas.
«Me parece lógico que se moleste el canciller británico por sus preguntas, pero no que lo hagan algunos argentinos, como hoy leí en los medios. Ya se ha perdido el decoro», afirmó la presidenta, quien sostuvo que debe existir «la defensa irrestricta de los derechos de los países».
A la vez, Cristina subrayó que «ningún país debe violentar los pilares básicos de una Nación» y agregó que «lo que no puede sostenerse y se torna francamente insostenible en todo el mundo es la negativa al diálogo», en relación al reclamo argentino por la soberanía de las Islas.
«La Argentina continuará trabajando duro en todos los foros y espacios institucionales para lograr consenso y voluntad sobre Malvinas. Nadie puede decirse demócrata si se niega al diálogo, en especial si detrás de eso se encuentra la Organización de las Naciones Unidas, cuyo plenario debe replantear su verdadero rol», puntualizó Cristina en su discurso.
En ese sentido, dejó en claro que las resoluciones de las Naciones Unidas deben ser definitivamente cumplidas en todos los terrenos» y subrayó que «muchas de las políticas impulsadas por los países poderosos deben modificarse porque llevan al fracaso».
La presidenta ejemplificó con los temas económicos y la lucha contra el narcotráfico y reclamó «apertura mental» para afrontar la actual crisis mundial que sacude al mundo.
Por otra parte, la Jefa de Estado resaltó que «el gobierno supo convocar a los jóvenes a la alegría, a la participación, a la paz para construir un país y una sociedad mejor».
«En esto deben participar todos los argentinos. Hay que cuidar las formas para reclamar derechos, pero reivindico la actitud de la embajadora Castro para que se abra el diálogo y se cumplan las resoluciones de las Naciones Unidas», señaló la presidenta, quien cerró el discurso recordando a los sobrevivientes y familiares de Malvinas.