El 9 de mayo se definiría la suerte de la empresa.
Se realizó una nueva audiencia judicial por la crítica situación de la histórica firma Jumalá y los 40 empleados que permanecen en la firma presionan para que se produzca la venta de las acciones.
Sonia, quien tiene 30 años de antiguedad en la compañía y es delegada gremial, afirmó en diálogo con Telediario que hay 3 empresarios interesados en la compra y resaltó que el próximo 9 de mayo será el Día D, en el que el juez a cargo de la quiebra, el doctor Rolando Guadagna, deberá resolver si se avanza en la operación.
Jumalá nació en octubre de 1959, impulsada por las familias Las Heras, Junquera y Roasio, quienes impusieron la industrialización y fraccionamiento de café, té y especias.
Tras una primera década de afianzamiento, experimentación y consolidación de la marca, la Empresa inicia en los años setenta un notable proceso de expansión industrial y comercial en base a esfuerzos y recursos propios, lo que comienza a ubicarla entre las principales empresas en su clase en el interior del país.
Sobre el final de los 90, la Empresa fue realizando importantes inversiones en infraestructura edilicia, equipamiento fabril, adquisición de tecnología y royalties, capacitación de recursos humanos y actualización de métodos y sistemas, entre otras, que posibilitaron proyectar un plan de expansión a todos los canales comerciales regionales y nacionales.