Miles de personas hicieron ayer un masivo masticado público de hoja de coca en Bolivia para probar que su consumo no crea dependencia , mientras el presidente Evo Morales pedía en Viena que se la reconozca como derecho ancestral de la región andina. El inusual “pijcheo” o “aculliku” (masticado de coca) masivo se realizó en las principales ciudades para apoyar al presidente Morales que planteó el retorno de Bolivia a la Convención de 1961 con una reserva para mantener su consumo como un derecho milenario.
Más de 50.000 persona s, fundamentalmente cultivadores de coca que es materia prima para elaborar cocaína participaron en la demostración pública en las plazas principales de La Paz, Oruro, Cochabamba, Sucre, Potosí, Santa Cruz y otras ciudades. En La Paz, la gente se concentró en la Plaza de la Revolución y colapsó por varias horas el tránsito en el centro de la ciudad por la llegada de miles de campesinos del interior.