Estaba sola en la vivienda junto al bebé cuando se produjo el hecho.
Tras la denuncia poco después del mediodía sobre un supuesto secuestro de su bebé, la madre de Lautaro Angeli fue derivada a la Policía donde habló durante al menos dos horas ante los investigadores.
La joven mujer, Jessica Moreno, había señalado que le arrebataron al pequeño cuando había ingresado por algunos minutos a la pileta pero el relato no convenció.
Incluso se pudo observar una leyenda en el espejo sobre una presunta amenaza. «Si no pagás la deuda no lo volvés a ver» indicaría el texto.
Los investigadores nunca creyeron en el relato y después de las 20:30 la derivaron a la casa, donde se produjo el macabro hallazgo.
En el extenso testimonial ante la policía, la mujer habría brindado detalles que permitieron dilucidar el hecho, aunque nunca reconoció ser la autora.
Cristian Angeli, el papá, fue derivado tras la muerte de su hija a la Unidad Judicial, donde se encontraba demorado junto a su pareja, aunque no había resultado imputado.