El Gobernador De la Sota modifica su gabinete con miras al tiempo electoral que se avecina. Aceptó el pedido de licencia por tiempo indeterminado del fiscal de estado.El fiscal de estado de Córdoba, Domingo Carbonetti, pidió una licencia por tiempo indeterminado por razones de salud, pedido que fue interpretado por la oposición como una «excusa» para evitar su destitución ante una eventual imputación en una causa por presuntas irregularidades cometidas en el banco Córdoba.
Carbonetti sería citado en los próximos días por el juez Manuel Molina, a cargo de una causa por suspuestas irregularidades con plazos fijos en la sucursal Bell Ville del Banco de Córdoba, en la que se le imputa ‘abuso de autoridad’.
El funcionario también fue acusado de un presunto cobro irregular de honorarios a contribuyentes de Rentas, en agosto de 2002 y de haber retirado del Banco de Córdoba un total de 150 mil pesos que estaban «acorralados», el 12 de diciembre de 2001.
Carbonetti se internó el lunes en un clínica especializada del centro de esta ciudad por una afección cardíaca y fue dado de alta ayer.
Luego de la breve internación, presentó un pedido de licencia por tiempo indeterminado que fue aceptado por el gobernador José Manuel De la Sota.
La licencia fue interpretada por los operadores políticos de la oposición como una «excusa» de Carbonetti para evitar la destitución ya que fue el propio De la Sota quién declamó públicamente que «funcionario que resulte imputado, funcionario que se va del gobierno».
Con ese argumento, el gobierno justificó la expulsión del entonces fiscal anticorrupción Luis Juez, a quien se lo acusó de cobrar honorarios profesionales mientras trabajaba bajo el régimen de «dedicación exclusiva» en una repartición pública.
Antes de ser separado de su cargo, Juez había acusado a Carbonetti por presuntos cobros irregulares a contribuyentes de Rentas.
Juez, que sería absuelto en los próximos días, anticipó que solicitaría su restitución al frente de la fiscalía Anticorrupción.
Respecto del mentado slogan delasotista, el presidente del partido Radical cordobés, Miguel Nicolás, sostuvo que «ahora es: funcionario imputado, funcionario que se enferma», ironizó.
«No hay dudas de que la licencia de Carbonetti, añadió Nicolás, es una forma de disimular las cosas por parte del Gobierno. Lo que debe hacer el funcionario es renunciar, porque está imputado en la justicia», aseveró.
Por su parte, De la Sota explicó que el fiscal «tiene un problema de salud que merece mucho cuidado, mucha atención, y entonces se tomó la decisión de reemplazarlo», dijo.
«Aquí en Córdoba funciona la justicia -continuó- con total independencia y todas las causas en que pueda estar Carbonetti van a tener su trámite normal», aseguró.
«Podría decirse que el hecho de que deje de ser funcionario implica que no tiene ningún tipo de privilegio», finalizó De la Sota.