Docentes y directivos salieron a recorrer las casas de sus alumnos y darles un empujón para que no se desalienten en sus estudios.
En una caravana llena de amor y buenas energías, integrantes de la escuela Luciernagas visitaron a sus alumnos para alentarnos a seguir estudiando a pesar de las dificultades que presenta la pedagogía a través de la virtualidad.
«Fue una sorpresa, nos recibieron con mucha emoción», expresó la profesora Paola Capello, directora de la entidad, y agrego «también es una recarga de pilas para los docentes que quieren saber como están sus alumnos»: