El presidente Alberto Fernández resaltó la «inversión y la confianza de empresarios nacionales que apuestan al desarrollo de la Argentina y acompañan al país en este momento difícil», al contrario de los que hacen «mal uso» del «apoyo» del Estado, y «dejan deudas y quiebras en sus empresas», al inaugurar una central termoeléctrica.
«Estoy contento de ver a empresarios que apostaron al país y por mucho que me critiquen me pone contento que lo hagan capitales nacionales porque no es menor que esos capitales hayan avanzado en la participación en la matriz energética, ya que así se ganó soberanía y desarrollo sin depender de otros», dijo el Presidente al participar desde la residencia de Olivos, por videoconferencia, de la inauguración de una central termoeléctrica de la empresa nacional Pampa Energía.
En el marco de la inauguración de la planta de generación térmica Genelba, ubicada en la ciudad bonaerense de Marcos Paz y una de las más grandes del país, el mandatario destacó que sus directivos aceptaron no aumentar las tarifas durante la pandemia por coronavirus y consideró que «la Argentina se construye asociando el capital público con el capital privado».
Así se construye la Argentina, con el esfuerzo de todos, asociando el capital privado al capital público”
«Así se construye la Argentina, con el esfuerzo de todos, asociando el capital privado al capital público. El capital público está para apoyar al capital privado con créditos, como lo hace el Banco Nación, por eso me irrita tanto cuando algunos hacen mal uso de esos créditos y dejan en el Banco Nación deudas y quiebras en sus empresas», aseveró.
Al respecto, diferenció que «no es el caso de Pampa, que lo que ha hecho es crecer con inversión privada de un modo sostenido y aportando al crecimiento y al desarrollo del país», aún en momentos difíciles como los que se transitan por la pandemia, y agregó que la presencia de la empresa en el país da «la tranquilidad de no depender de otros».
«Con esto, estás respondiendo un poco a lo que son los objetivos centrales del gobierno, que es asociar al capital privado y al público en el desarrollo energético, que para que una economía crezca es un insumo fundamental», le dijo el Presidente a Marcelo Mindin, titular de la empresa de energía.
Recordó que apenas comenzó la pandemia habló con los directivos de Pampa Energía para que no haya aumentos de tarifas de luz y «ellos apoyaron» la iniciativa y asumió que «ya habrá tiempo de discutir» sobre el cuadro tarifario del servicio energético cuando pase la pandemia.
«Agradezco a los directivos que confiaron en la Argentina en un momento difícil, cuando la economía está lejos de funcionar a pleno», dijo y vaticinó que «en no mucho más la economía va a funcionar a pleno y va a necesitar mucho de esta energía».
La planta termoeléctrica «es enorme, ya que provee 1237 MW y lo hace consumiendo poco gas, que son insumos cada vez más costosos porque van desapareciendo de la faz de la tierra y cuyos precios son más difíciles de sostener», precisó el jefe de Estado.
Fernández aprovechó esos datos para ponderar «cómo cambió la matriz desde una preponderancia extranjera a una clara preponderancia de capitales nacionales».
«Uno allí ganó soberanía en términos desarrollistas, ganó autobastecimiento y eso es muy importante para el desarrollo de un país, como también lo es la inversión en tecnología, que ahorra en combustibles fósiles y eso es importantísimo», enfatizó.
En la central termoléctrica estuvieron presentes Mindin y el intendente de Marcos Paz, Ricardo Curuchet; en tanto que por videoconferencia lo hicieron, además del Presidente, el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, y el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa.
Mindin, por su parte, señaló que «a pesar de las dificultados» por la pandemia de coronavirus, Pampa «siguió invirtiendo» y con la nueva planta se convierte en la «planta eléctrica más grande del país, con tecnología de punta», al tiempo que resaltó que «casi el 70% de toda la generación es argentina».