Desde el 23 de diciembre se encuentra en vigencia el «dólar solidario», un impuesto de 30% para las compras de moneda extranjera y consumos en el exterior que no fue bien percibido por las cámaras de Turismo.
«La falta de políticas claras de la implementación de este impuesto, es lo que no nos permite trabajar tranquilos»asegura Paz Stauffer, Vicepresidenta de la Cámara de Turismo de Río Cuarto. A su vez detectan una caída del 60% en paquetes turísticos o gestiones de viaje, que suma además una baja en el turismo receptivo, es decir, para recibir turistas también se necesita mandar turistas al exterior «es una balanza que mantiene la conectividad»afirma Araceli Isla, Vicepresidente de la Asociación Argentina Avaece (Asociacion Civil de Agentes y Agencias de Viajes Pymes Argentinas.)
Los reclamos que alzan la voz contra el impuesto del 30% para giros en el exterior, también se unen a la lucha por la situación de las Pymes y el trabajo directo e indirecto que generan las agencias de viajes que han sido duramente golpeadas por la carga impositiva que hizo sentir la crisis.