En una jornada de furia, un joven de 24 años comenzó a disparar contra una vivienda y un automóvil ubicado en Sarratea al 600 y como consecuencia de la brutal agresión, una mujer de 53 años y aun adolescente de 14 años resultaron con heridas que no fueron de consideración.
El rapto de locura concluyó cuando llegó al sector un móvil policial y los efectivos lograron advertir que el sospechoso intentaba esconderse en la fosa de un taller mecánico. Tras su detención, secuestraron el arma utilizada por el agresor.
Personal de emergencias debió asistir a los heridos y se realizó un operativo cerrojo en el lugar para permitir el trabajo de la Policía Científica.
Los vecinos alertaron en diálogo con Telediario que se escucharon varios disparos y resaltaron que a la hora del hecho «hay muchos chicos en la calle, porque muchos regresan ó van a la escuela».