Así lo confirmó Tomás Wheeler, abuelo de Jazmín y Ariana, a Telediario Digital. La jueza firmó la restitución para que el juicio de la tenencia se desarrolle en Río Cuarto tal como estableció la jueza de Río Cuarto. Así, el padre de las niñas las traerá de regreso a la ciudad y las pequeñas, de tan sólo 7 y 10 años, podrán volver con su madre y abuelos.
Jazmín y Ariana no tienen contacto con su madre y sus abuelos desde julio. El padre, perteneciente a la Policía de Buenos Aires, las fue a retirar al colegio que iban en Río Cuarto, se las llevó y cortó todo contacto con los Wheeler. «La agrupación metropolitana lo está defendiendo sin la parte legal en regla. Él tiene todo esto armado desde hace meses», aseguraron.
Este lunes, la mamá, la abuela y la abogada de la familia, fueron a ver a las niñas a la escuela en la que están ahora (en Villa Devoto) y no sólo que no les permitieron verlas niñas sino que quedaron demoradas por la policía. Le piden desesperadamente a la Justicia que tome medidas ya que Fernando De la Cruz tiene denuncias por violencia familiar.
«El lunes encontramos un momento para llegarnos a la escuela y tratar simplemente de verlas, para sacarnos la duda de que realmente estén bien e incluso estén en Argentina. Llegamos al colegio de Villa Devoto y en el momento en que las niñas van saliendo, tiran los bracitos hacia su mamá, desesperadas y con los ojitos llenos de alegría, son arrastradas desde atrás por una persona que no sabemos si es un directivo o la abuela paterna que es la encargada de ir a buscarlas porque el padre ni siquiera la lleva al colegio», comenzó relatando la abogada Adela Tissera.
Y agregó: «En menos de dos o tres minutos teníamos cinco móviles policiales alrededor. Se trata de la Policía Metropolitana donde el padre tiene un cargo bastante alto. Puedo dar fe que este señor estaba sentado en un lugar aparte del colegio dándole instrucciones a más de diez policías. Nosotras estábamos semidetenidas en dirección».
En el mismo sentido, Tomás Wheeler, abuelo de las pequeñas, afirmó que «cuando se maneja de manera corporativa se puede hacer cualquier cosa». «Él (por el padre) tiene muy claro que lo van a defender», indicó.
En tanto, las niñas fueron escondidas en un receptáculo con la abuela paterna e incluso las hacían esconder debajo de la mesa para que la abuela materna no las pueda ver a través del vidrio. Había dos policías delante de la puerta impidiendo a la abuela ver a sus nietas.
La letrada comentó que se basaban en una orden de restricción vencida. «No llevaron una orden judicial, llevaron una fotocopia de una orden de restricción vencida. Nos demoraron como dos horas hasta que firmamos en disconformidad el acta y nos retiramos del lugar sin ver personalmente a las nenas. Constanza llevó unos regalitos por el Día del Niño y la abuela paterna se los tiró», añadió Tissera en el living de Telediario.
Por otro lado, señaló que van a tomar las medidas legales que correspondan porque además están en una forma completamente irregular en ese lugar ya que nunca se les dio el pase desde el colegio de Río Cuarto y la Policía actuó sin una orden judicial.
«Lo bueno fue que las niñas vieron que su mamá y su abuela están peleando por ellas. Estamos seguros que hay muchísima mentira y alienación mental en lo que le están haciendo a esas criaturas. Consideramos que muy pronto vamos a tener una resolución de la causa. Lamentablemente los tiempos de la Justicia no son acorde a los tiempos reales pero la Justicia está llegando. Las niñas tuvieron una entrevista, no tenemos los resultados pero sabemos que fue bastante positiva», manifestó la abogada.
Por último, destacaron que hay muchas instituciones en Buenos Aires que los han apoyado, brindado asesoramiento, como así también la municipalidad de Río Cuarto y la Gobernación de Córdoba.