En una nueva visita a Córdoba, el presidente de la Nación estuvo primero en la central nuclear de Embalse, que comenzó a producir energía nuevamente en las últimas semanas, y luego viajó de sorpresa a Los Cóndores, donde visitó a una vecina y saludó a la gente en la plaza.
Ya en la capital provincial, el jefe de Estado habló en la Fábrica Argentina de Aviones (Fadea), en donde inauguró una planta de ensamble y montaje de aerogeneradores. «El camino es hacia adelante, nunca más hacia atrás», afirmó.
«Los cordobeses tienen eso de ir siempre para adelante, como pasó con la pista del aeropuerto», destacó. Luego hizo principal hincapié en el cambio que se notó en Fadea desde 2015 y sostuvo: «Encontramos a la empresa quebrada, era un depósito de chatarra. En diez años no habían construido ni un solo avión y de repente este gigante que estaba moribundo revivió y dejó atrás esos años de abandono».
Siguiendo con el tema, el mandatario ironizó con una frase que patentó el gobierno kirchnerista: «La pregunta es cómo pasamos de ese depósito de chatarra a la fábrica que es hoy. No fue haciendo magia, fue confiando en nuestro futuro».