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El diputado radical riojano Héctor Olivares, baleado el jueves a metros del Congreso de la Nación, fue operado el viernes por segunda vez en el hospital Ramos Mejía y su estado sigue siendo crítico, según informaron este sábado al mediodía en un nuevo parte médico de las autoridades del centro asistencial.
«El paciente está inestable, en terapia intensiva, con alto requerimiento de drogas vasoactivas. Sigue con los reemplazos de las funciones de órganos, función respiratoria, función renal con diálisis y soporte hemodinámico para mantener su función cardiovascular», informó Pablo Rossine, subdirector del hospital.
Según el médico, Olivares presenta «una falla multiorgánica desde que ingresó en shock al hospital, en una situación de vida o muerte», y que su estado sigue siendo crítico tras ser baleado a metros del Congreso junto a su asesor Miguel Yadón, que murió en el acto.
«Seguimos en contacto permanente con la familia. Hay que ser cautos porque puede haber cambios en cualquier momento», agregó Rossine.
Respecto de la nueva intervención, Alejandro Muñoz, jefe de departamento de urgencias del Ramos Mejía, explicó que «fue la continuación de la primera cirugía» y que «se hizo control de daños, se resecó el intestino perforado y se drenaron las cavidades». «Por el momento no habrá otra intervención», agregó.
De no mediar complicaciones en la salud del diputado, el próximo informe será brindado a la prensa el próximo lunes al mediodía.
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