«Hoy la Cárcel está repleta con 790 reclusos pero no tenemos la situación de Bouwer», afirmó el juez Correccional Gustavo Echenique, en medio del debate sobre las críticas al servicio penitenciario en Córdoba.
En diálogo con Póster Central, de FM Gospel, Echenique afirmó que «del total de presos la mitad tiene condena firme, el resto son procesados»
«Los delitos de violencia familiar aumentó el número de condenas y hechos investigados. Todo esto implica el aumento de la cantidad de presos. Lamentablemente los plazos del Código Penal definen el tiempo de procesamiento. pero no hay puerta giratoria. En delitos menores no se puede mantener privada a la persona», indicó.
El magistrado sostuvo que «existe una prohibición de alojar en el mismo pabellón a condenados y procesados. Después, el criterio de distribución lo resuelve el propio director del Penal, según el perfil de los internos»
«Legalmente las celdas de castigo no existe. Si hay alguna forma de vejación es delictiva. Lo que está permitido es establecer medidas de sujeción cuando corre peligro la vida del interno ó de terceros», aseveró.
Para Echenique, «la cárcel es un reflejo de la sociedad. Si hay drogas y comercialización en la sociedad, también en la cárcel. Visito la cárcel todos los miércoles y advierte que, a pesar de que hay tráfico, las personas que tienen voluntad de dejar la adicción tienen esas chances. Favorece el aislamiento»
«Vivis empastillado»
Verónica Navarro estuvo presa en la Cárcel de Río Cuarto y hoy lucha por los derechos humanos de los detenidos en el penal. En diálogo con Póster Central aseguró que «en la cárcel vivis encerrada hasta que te dejan salir un ratito al patio. Yo en la cárcel trabajaba y estudiaba»
«Es difícil convivir con las otras internas. Eramos muchas y si es difícil convivir afuera, imaginate si estas todo el día encerrada. Antes dormíamos 33 internas todas juntas, no había lugar, todas en un pasillo. Ahora hay más de 50 reclusas, pero ampliaron el pabellón», resaltó la mujer, quien admitió: «Nosotros nos quedamos sin padres y por agarrar la vida fácil quedamos los tres hermanos detenidos
«Cada una tenía que tener su limpieza o te castigaban en un nicho, en una celda de castigo. Yo estuve en los nichos. Es un pasillito. Ahí te quedabas sin ropa, sin nada. Aislada. Estuve ahí y me daban tantas pastillas que dormía todo el día. No tes das cuenta de los días que pasan. Las pastillas te las daba el mismo psiquiatra para que te tengan tranquila, estas todo el día empastillada», recordó.
Agregó que «cuando salís de la cárcel estás a la deriva».
«Yo tenía una casa y una familia. Otros chicos no saben que hacer y caen de nuevo en el delito. Algunos no quieren ni salir. Te dicen rebuscatela como puedas y a veces no podes. Algunas madres estan trabajando para reintegrarlos, buscarles un trabajo», argumentó.
Para Verónica, «el que es adicto, sale de la cárcel más adicto y comerten un delito peor».
«La cárcel no reintegra a nadie (sic). A veces tenes que rogar para que te atienda un médico ó una psicóloga. Tratamiento para las adicciones no tiene nadie, solo te dan pastillas», subrayó.