Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner encabezaron hoy su primer acto como compañeros de fórmula en Merlo, donde se inauguró el Parque Municipal Presidente Néstor Kirchner, un homenaje a 16 años de la asunción del fallecido ex presidente. En el encuentro, seguido por una multitud, la ex mandataria convocó a todos a reconstruir el país porque «no hay triunfos individuales». A su turno, Fernández señaló que la miseria que está dejando el gobierno de Cambiemos anticipa un tiempo complicado pero se mostró seguro de que no se tolerará la pobreza e indicó que «lo vamos a resolver como lo hicimos con Néstor”.
Diversos sectores marcharon hacia la localidad del conurbano bonaerense en un acto preparado por el intendente Gustavo Menéndez. El jefe comunal fue el anfitrión en el escenario. “Hoy es una fecha importante para nosotros”, arrancó Menéndez, junto a la fórmula presidencial. “No saben cuánto los extrañamos”, dijo el intendente respecto de lo vivido desde 2015. “El pueblo ha sufrido horrores y los intendentes resistieron junto a los que les duele”, agregó. “Necesitamos volver a ser un país que no deje a nadie afuera”, siguió y recordó que “en un país atravesado por la crisis” asumió Néstor Kirchner en 2003. Menéndez rescató “la inteligencia” de Cristina porque “eligió al mejor hombre” para la fórmula en el marco de “una decisión histórica”.
Cristina hizo un corto recorrido de la historia, Recordó el 25 de mayo de 1810, y luego el de 1973 que representó el final de la proscripción al peronismo. “Mi 25 de mayo preferido fue el del Bicentenario” y lo calificó como «perfecto” porque “sentí cosas en las calles de Buenos Aires que no había sentido nunca” como “nueve presidentes latinoamericanos caminando entre la multitud sin dispositivo de seguridad”. Y lanzó: “Era otra Argentina, sin gatillo fácil”, en un día en el que “los argentinos nos volvimos a reencontrar” que “estábamos en paz con nosotros mismos”.
La ex mandataria recordó que entonces “había trabajo, educación y futuro”. Definió el presente como “dramático” y se preguntó cómo se llegó a este momento”. Para ella “se trata de volver a ese espíritu, lo tenemos que hacer y me siento obligada”. Cristina dijo que “las decisiones responden a convicciones profundas”, y que “uno se puede equivocar o no, nadie tiene asegurado el éxito”.
“Junto con Alberto vamos a ayudar. No esperen que dos dirigentes puedan hacer todo. Creo que el entre todos va a exigir que muchos sectores, empresarios, sociales, medios, podamos celebrar un reencuentro, un contrato social que nos permita entender que no hay triunfos individuales si la realización de una sociedad no es colectiva”, dijo en otro pasaje mientras era observada por Menéndez y Fernández con quienes compartió el escenario.
“El 25 de mayo de 2003 se parece mucho a hoy, fue el día que Néstor llegó para cambiar la historia”, aseguró sobre “cuatro años maravillosos en mi vida” en los que “sacamos a millones de argentinos de la pobreza y la marginación”. Algo que prometió hacer “con los millones de pobres que deja Macri, no lo podemos tolerar y lo vamos a resolver como con Néstor”.
“Los parecidos son muchos si uno compara con 2003”, prosiguió el ex jefe de Gabinete. “Hay gente que se levanta con miedo de perder el trabajo y otros deambulan buscando empleo”. Recordó que “pagamos la deuda sin hacer pasar a los argentinos el padecimiento de pagar”. Contó que “yo tenía un tipo en el despacho al lado mío, con convicciones, que sabía cómo actuar: Néstor Kirchner”. Aseguró “estuvimos en un laberinto y salimos. Yo estuve y supe cómo salir, como vamos a salir ahora de este momento gris de la Argentina”.
“El tiempo que se viene es el tiempo de todos, entre todos vamos a sacar al país de la postración en que la pusieron”, fueron las palabras de cierre del precandidato.