Así lo afirmó Ismael Rins, defensor del pueblo, ante la noticia de que en invierno, las boletas de gas tendrán un descuento del 20% y la diferencia se pagará a partir de diciembre próximo, durante los meses de menor consumo. Desde abril dicho servicio aumentará alrededor del 30%, aunque aún no está confirmado.
La decisión política responde al pronunciamiento de la dirigencia radical en el que se reclamó una revisión de los aumentos de tarifas de gas, luz y transporte, y a trascendidos desde el ala política del Gobierno sobre la preocupación originada por los incrementos tarifarios en los meses preelectorales.
En este sentido, Rins sostuvo que la determinación «es un claro indicio de que la gente no puede pagar». «Este es un viejo anhelo de las distribuidoras que tienen un ciclo mediante el cual en invierno facturan mucho y en verano, poco», agregó.