La cita corresponde a Martín Fernández, encargado de la murga Mulato Mulé, quien se refirió a la ola de violencia que se vive en la ciudad.
«En Río Cuarto asusta el aumento de los índices de violencia. La problemática que vemos es que el blanco de la crítica por parte de la mayoría de la sociedad es el comportamiento de los menores. Si existieran muchas murgas, orquestas barriales, clubes de fútbol, desarrollo de deporte y otras políticas públicas, no habría estas situaciones de violencia», afirmó.
En ese sentido, Fernández le atribuyó la mayor responsabilidad al Gobierno ya que, desde su punto de vista, «hay una ausencia del Estado, en todos sus niveles, respecto a políticas públicas que contengan, brinden capacitación y formación a esos adolescentes. En medio de ese vacío del Estado, principalmente Nacional, nos encontramos con estas situaciones de violencia».
Por otra parte, hizo referencia a la polémica sobre la baja de la edad de imputabilidad y sostuvo que respecto a esto «hay un fogoneo de parte del Gobierno Nacional» y que el proyecto ley no tiene ningún asidero. «Tampoco hay un tratamiento de los menores que contemple su educación, su capacitación. Todo eso no existe. Decir que vamos a bajar la edad es fuego artificial», expresó.
Por último, dijo que «recursos y financiación no faltan sino que, hoy en día, están dirigidos para otro lado». «Es dinero que no queda acá, no queda para los jubilados, ni para los maestros, no queda para el común de la sociedad. Y por lo que nosotros vemos, va a empeorar», concluyó.
Además, en la previa del Carnaval, la murga barrial ya cuenta con más de 150 personas que participarán del evento. «Para nosotros es un orgullo que seamos tantos y pateemos todos para el mismo lado», contó uno de los integrantes.