El hecho ocurrió este sábado en un domicilio en Banda Norte. El niño de 4 años sufrió quemaduras en el rostro y en las extremidades superiores tras arrojar una botella con diluyente sobre el fuego de un disco, lo que provocó una explosión que afectó el cuerpo del pequeño.
Luego del accidente, el nene fue trasladado desde su casa al nosocomio de Río Cuarto pero finalmente los médicos lo derivaron al hospital de niños de Córdoba por la gravedad de las lesiones.