En el marco de una nueva fiesta tradicionalista que se lleva a cabo durante el fin de semana, se pudo apreciar en la tarde del sábado el Paseo Gaucho que inició en el Club Tiro Federal y llegó hasta el Centro Cívico. Hasta allí desfilaron numerosos jinetes que año tras año alimentan una de las tradiciones argentinas.
El día domingo, y luego de la peña de esta noche, continuará el encuentro con la apertura del campo hípico y la fecha zonal clasificatoria del Campeonato de Jinetes Afederados rumbo a Jesús María.
Fabio Vélez, organizador del evento gauchesco, comentó que siente orgullo porque «ser un tradicionalista es un sentimiento muy importante, muy grande. Se lleva dentro de uno, en las raíces».
Sin embargo, también señaló que en un contexto de globalización resulta complicado seguir manteniendo las costumbres nacionales. «Me parece que con el paso de los años se va perdiendo esta tradición. Nosotros somos el legado, los que nos aferramos a nuestras costumbres y queremos transmitirlas. El viernes tuvimos una charla sobre Tenencia Responsable de Equinos y eran muy poquitos. Tal vez si viene alguien extranjero tiene más convocatoria. Pero somos los encargados de llevar este mensaje, este legado y vamos a seguir insistiendo», manifestó Vélez.
Además, el integrante de la organización tradicionalista, dejó en claro que «un pueblo que no se aferra a sus raíces no es nada y un viento lo tumba. La patria se hizo a caballo. Si nos remontamos a la época de San Martín, de cómo cruzó la cordillera, fue todo a caballo».
Por último, Fabio Vélez sostuvo: «Es posible que la coyuntura nacional influya a la hora de participar o no en estos eventos porque el caballo tiene un costo pero no sólo la gente que anda a caballo es gaucha. Hay academias de danza, talleres culturales que son gratis, una bombacha cuesta menos que un jean, así que si te querés encriollar y defender tus raíces no hace falta tener tanta plata. Lo mismo pasa con la literatura. Basta con leer el Martín Fierro, recurrir a José Hernández, a Leopoldo Lugones. No es una cuestión económica sino de inculcar los principios».