Hoy la cinta la llevás vos, le dije. Y ella me contestó que iba a hacer un gol. Entró a la cancha y los compañeros la palmeaban”, contò el entrenador.
Federico García, el técnico tricolor de la categoría 2011, nunca olvidará la carita de Mahia Macias cuando dos minutos antes de entrar a la cancha para jugar el clásico, le dijo que iba a ser la capitana del equipo.
“Hoy la cinta la llevás vos, le dije. Y ella me contestó que iba a hacer un gol. Entró a la cancha y los compañeros la palmeaban”, contó Federico, el entrenador de arqueros de todas las categorías de Nacional en Aufi y quien está desde este año al frente de la 2011 desde que aprobó la licencia C, del curso de entrenador en la ACJ.
“Elegimos al capitán por méritos y ella los había hecho, al igual que un par de sus compañeritos. Mahia se lo había ganado con su esfuerzo, pero también queríamos mostrar un Nacional diferente. Un Nacional inclusivo”, explicó García sobre la única niña del equipo con cuyo gol en la hora ganaron el clásico y al partido siguiente se consagraron campeones del Apertura al vencer a El Tanque. La idea de García fue compartida por Gustavo Sorrentino, vicepresidente del Aufi tricolor, y del coordinador German Rolín.
A Fabio, el orgulloso papá de Mahia, le encanta el fútbol y siempre está mirando algún partido, pero nunca imaginó que su hija iba a jugar. En realidad, el otro día él y su esposa Dahiana miraban fotos viejas y en todas la niña aparece con una pelota. Hasta una en que con dos años tenía puesto un vestidito blanco para ir a una fiesta y una pelota bajo el brazo. “Era algo que rompía los ojos, aunque capaz que no nos dábamos cuenta. Y que se fue dando. Hoy cuando la veo correr con la pelota en los pies con una enorme sonrisa en la cara me siento feliz porque sé que está haciendo lo que le gusta”, contó sobre su hija, quien arrancó a jugar a los cuatro años y medio en “Estrella de Oro”, el club de baby fútbol del barrio Piedras Blancas donde viven.