El ex Gobernador de Córdoba, quien falleció el sábado a la noche en un trágico accidente automovilístico, fue despedido hoy por una multitud que se congregó en el Centro Cívico. Familiares, seguidores, dirigentes y ciudadanos le dieron el último adiós a quien fue tres veces la máxima autoridad de la provincia.
Los restos de José Manuel De la Sota fueron trasladados al Cementerio San Jerónimo. Allí también están depositados los restos de su padre, fallecido en un accidente hace 40 años, y los de su hija Agustina, quien murió ahogada en una pileta a sus 5 años.
El Gobernador Juan Schiaretti encabezó una ceremonia junto al intendente Ramón Mestre, el ministro del Interior Rogelio Frigerio, el presidente de la Cámara de Diputados de la Nación Emilio Monzó, el ex gobernador de Entre Ríos Jorge Busti y el arzobispo Carlos Ñañez, entre otros funcionarios, familiares y allegados.
En su mensaje, Schiaretti reinvidicó la estatura de “dirigente político, gobernante y estadista” del ex gobernador y agradeció las muestras de afecto y congoja expresadas por los habitantes de la provincia y un amplio arco de gobernantes y dirigentes del país. “Fue sin duda la mayor figura que tuvo el peronismo de Córdoba en nuestra historia y uno de los mayores dirigentes en el orden nacional. Él dejó como impronta que del dolor, la injusticia y la exclusión sólo se sale con unidad y sin rencores. Esta es la impronta que puso al peronismo cordobés”, manifestó Schiaretti.
Fuente y foto: Gobierno de Córdoba.